Es tanta la basura que tiramos todos los días que va a llegar el momento en que no haya espacio en el planeta para depositarla. Hay de todo, desechos de comida, electrónicos, de las construcciones, plásticos, de embalaje, de hospitales, químicos, metálicos…y de la industria textil.
Pero ¿sabías que la producción de ropa es considerada como la industria más contaminante para el medio ambiente, pero también lo residuos que genera?
Tan solo en la Ciudad de México se tiran aproximadamente tres mil 700 millones de toneladas de residuos textiles al año, de los cuales sólo se reciclan una mínima parte.
De ¿qué se componen los residuos textiles?, fundamentalmente de prendas de vestir, calzado y textiles de los hogares como cortinas, ropa de cama, interior, toallas, prendas viejas o ya usadas.
De acuerdo con información de la organización ambientalista internacional Greenpeace, la contaminación que genera la producción de ropa es de aproximadamente 500 mil toneladas de microplásticos al año.
De hecho, la Organización de las Naciones Unidas ha dicho que la producción de esta industria es considerada la más dañina y contaminante para el medio ambiente, ya que es responsable del 20 por ciento de las aguas residuales globales y 10 por ciento de las emisiones totales de carbono.
Y no sólo eso, se estima que el 73 por ciento de las prendas producidas anualmente terminan incineradas o en basureros, lo que contribuye a la polución del suelo y aire.
Es tal la cantidad de residuos textiles, producto también de las modas de “úsese y tírese” que lleva a usarlas dos o tres veces y desecharlas, que algunas empresas ya comienzan a tomar conciencia sobre las miles y miles de toneladas que ya no hay donde poner, que han comenzado con campañas de reciclaje.
Levis por ejemplo, tiene su campaña de jeans que entre más los uses y los gastes, más a la moda estás. El objetivo es que no los deseches a la primera.
Otra marca es Vanish que ha entrado al reuso de la ropa impulsando la cultura de la reparación para alargar la vida de las prendas y con esto generar un impacto positivo en el medio ambiente.
Su objetivo es buscar la manera de rescatar, reciclar, rehabilitar y reusar la ropa para ayudar a reducir los desechos textiles.
Una manera de poner nuestro “granito de arena” es realizar un consumo responsable sobre las prendas de vestir dándoles un segundo uso, o llevarlas a las tiendas comerciales que fomentan el reciclaje textil, o también optar llevarlas a los bazares donde se les da una segunda oportunidad. PdC.
Foto de MART PRODUCTION.