Con esto del coronavirus, información viene información va; que si tales medicamentos sirven para aliviarnos; que si tales alimentos son efectivos; que si los remedios de la abuela para no contagiarnos; que si tales hierbas, que si esto, que si lo otro; o por el contrario, que de nada sirve el cubrebocas o peor aún, las vacunas.
No hay nada más cierto que lo que dice la ciencia médica sobre cómo hacer frente a este virus que vino a cambiar la vida cotidiana.
Al respecto, la especialista en virología de la UNAM y miembro del Colegio Nacional, Susana López Charretón, asegura que la única protección efectiva que se tiene hasta ahora contra la COVID-19 son las vacunas y las medidas ya conocidas: cubrebocas, lavado de manos y distanciamiento social.
Que no funciona
A partir de la aparición del virus SARS-CoV-2 surgieron productos milagro que prometían prevenir o curar la infección como el dióxido de cloro, la hidroxicloroquina, o la ivermectina, que ya se ha demostrado no tienen efecto alguno.
*El dióxido de cloro, los tés y otras medidas que no funcionan, viralizados en redes sociales o de boca en boca, son un riesgo alto para la salud.
“Ninguno de ellos protege. La única protección son las vacunas”, recalca la integrante del Instituto de Biotecnología.
*Entre las últimas noticias que han circulado, es que dos ácidos de la cannabis bloquean el proceso que utiliza el virus para infectar. La experta comenta que es una investigación aún en proceso la cual se ha tergiversado.
Que si funciona
Otra desinformación a partir de la aparición de la variante Ómicron y del incremento en los contagios en México y el mundo, es que las vacunas ya no sirven contra esta cepa, y que tampoco los cubrebocas realizan su función; el argumento es que si las vacunas funcionaran, no habría tantos contagios.
*Al respecto, López Charretón aclara que las vacunas si funcionan.
*La mayor parte de la gente que se infecta y está vacunada tendrá síntomas leves. Explica que las vacunas no protegen contra la infección, sino contra la evolución grave de la enfermedad y de consecuencias más severas como la muerte.
*Pese a que el virus presenta algunos cambios, en esencia sigue siendo el mismo y aun así, las medidas usadas desde el principio de la pandemia siguen funcionando, insiste la integrante de la Academia Mexicana de Ciencias.
*En el caso de los cubrebocas, utilizar uno de tela es mejor que nada y si la gente no puede tener los KN95 puede usar dos quirúrgicos y uno de tela; es decir, tratar de filtrar en la mayor medida posible el aire que respiramos y exhalamos.
*Una idea popular más es que “la pandemia es negocio de las farmacéuticas”, a lo que la experta reconoce que hay una parte de negocio, pero también hay esfuerzos de la Organización Mundial de la Salud y empresas para facilitar o hacer más accesibles los medicamentos y vacunas para países de menos recursos.
*La industria farmacéutica invierte miles de millones de dólares en investigación y desarrollo, por ejemplo, sólo en 2019, según el informe del Congressional Budget Office, de Estados Unidos, se estima que destinó 83 mil millones de dólares a ese rubro (https://www.cbo.gov/publication/57126).
*Una desinformación adicional es que si esta variante es más leve, hay que salir a contagiarse; sin embargo, la especialista aclara que Ómicron no es más leve, sino más contagiosa.
Parece más “ligera” porque hay más personas vacunadas, “pero eso no quiere decir que no la podrías pasar mal. Sigue siendo una ‘ruleta rusa’ cómo evolucionará cada quien. A cualquiera puede irle mal”. PdC.