“Amor, mentiras y sangre” me dejó con el cuerpo tenso, absolutamente audaz y atrevida, la siniestra historia de romance, violencia y redención dirigida por Rose Glass. Combinando una historia de amor lésbico con un thriller musculoso, esta película cruda, sangrienta y descarada fue estrenada en el Festival de Cine de Sundance de este año.
Lou (Kristen Stewart), una trabajadora de gimnasio que pasa sus días trapeando pisos, desatascando retretes y plastificando tarjetas de membresía, apenas sobrevive su existencia en un pequeño pueblo. Su mundo se transforma en un instante cuando la culturista transeúnte Jackie (Katy O’Brian) cruza su camino.
Lou se enamora perdidamente de esos músculos duros como piedras, e invita a Jackie a vivir con ella. Ambiciosa hasta la médula, Jackie comienza a entrenar para una competencia en Las Vegas, pero… comienza a inyectarse esteroides por el estímulo de Lou.
El plan es que las dos hagan ese viaje épico hacia el oeste, pero… un sorprendente acto de violencia que involucra a la hermana de Lou (Jena Malone) y su cuñado (Dave Franco) cambia todo. La verdad sobre la familia criminal de Lou se revela, complicando aún más no solo el romance con Jackie, sino arrastrando a ambas a un torbellino absoluto de caos.
Rose Glass ha creado una película con un ambiente de thriller de crimen delicioso. Su estilo audaz y distintivo se refleja con una voz que prácticamente grita con una rabia e intensidad subyacentes (y uno de los mejores usos del realismo mágico que he visto en una película). Lou y Jackie son personas imperfectas, pero simplemente no puedes evitar apoyar su relación.
Son capaces y culpables de realizar algunas cosas muy, muy malas, pero qué más da, si estas dos están destinadas la una para la otra con su explosiva historia de amor al límite
Kristen Stewart y Katy O’Brian ofrecen interpretaciones impresionantes, encarnando a sus personajes con un espíritu feroz que refleja la lujuria y el deseo justos para su caótica relación. Su química es palpable e intensa, lo que añade un elemento adicional de autenticidad a la historia.
El resto del elenco no se queda atrás, con interpretaciones efectivas de Anna Baryshnikov, Ed Harris, Dave Franco y Jena Malone.
Apasionada y provocativa, “Amor, mentiras y sangre” es el tipo de película que te llega hondo. Dejando de lado la violencia y la venganza, verás una historia de amor queer que es desesperada y te deja sin aliento. PdC.
Crítica de Antelmo Villa.