México es un país con infinidad de cosas que nos hacen un pueblo “muy especial” por decir, tenemos una increíble gastronomía, lugares maravillosos donde viajar para vacacionar o relajarnos y también para hacer negocios porque no; gente que es cariñosa, cálida, amable y siempre dispuesta a la fiesta y a la diversión, pero además algo que nos distingue es que siempre tenemos alguna frase que decir en algún momento determinado.
Y precisamente de esto es que quiero hablar un poco. En mi infancia mis abuelitas o tías siempre tenían una frase con la que daban en el punto exacto cuando querían decir algo para terminar o iniciar; me di a la tarea de buscar esas frases que en algún momento de nuestra vida escuchamos e incluso que hemos utilizado y que también quiero compartir con nuestros amigos en “extranjía”, para que no los agarren de sorpresa.
Buscando y buscando encontré en México Desconocido unas frases que son comunes en nuestra vida y para no perder más tiempos se las pongo aquí.
¡Ya nos cayó el chahuistle!
Para empezar, hay que decir que chahuistle es una “enfermedad del maíz”; no se sabe cuándo se inició con el uso de esta frase, pero se empleaba para indicar que el maíz había sido invadido por una plaga. Podemos decir que cuando la usamos es por alguna cosa o persona que no nos agrada y que nos tomó de sorpresa.
¡Ya está enchinchando!
No se conoce el origen o en qué momento se empezó a usar, pero, el significado es que alguna persona nos está haciendo perder el tiempo.
¡A Chuchita la bolsearon!
Según dicen se empezó a utilizar en el periodo colonial. Y dio inicio con una trabajadora doméstica a la que le decían de cariño “Chuchita” a quien se le pedía que hiciera un “mandado” (en México se utiliza esta palabra cuando se le pide a alguien que realice un trabajo o misión).
Cada vez que volvía del mandado regresaba con menos artículos o cambio, y cuando su patrón le preguntaba, ella respondía que la habían bolseado. Cansado el patrón porque cada vez era lo mismo, en una ocasión que regresó le dijo: “Y ahora qué pasó, no me digas que a Chuchita la bolsearon”. Y de ahí nuestra maravillosa frase que en alguna ocasión de niños no lo dijeron.
¡Aguas!
Se utiliza como advertencia y proviene de la Colonia, ya que en ese tiempo no había drenaje ni existían baños y las personas utilizaban bacinicas para hacer sus necesidades fisiológicas. Una vez que éstas se llenaban, las personas las tiraban por las ventas y por lo tanto gritaban ¡aguas!, para prevenir a los que pasaban. Sobra decir, pero origen tan ¡desagradable! Que bueno que ahora si hay sanitarios y drenaje.
¡Sepa la bola!
Surge durante el período de la Revolución Mexicana. Harta la gente del Porfiriato muchas veces formaban grupos numerosos que hacían destrozos y al preguntar las autoridades quienes eran los culpables, obvio, nadie señalaba culpables en particular y lo que decían era “fue la bola”. Actualmente la utilizamos cuando nos preguntan quién fue el que hizo algún hecho o destrozo y nosotros contestamos “sepa la bola” frase que utilizamos cuando niños traviesos.
¡Ni yendo a bailar a Chalma!
Esta frase me encanta en lo particular, y la empleamos cuando queremos decir que el problema que se tiene no se puede solucionar. Hay un pueblo en el Estado de México que se llama Chalma y ahí está el Santuario del Señor de Chalma a quien se acude para pedirle milagros. Pero antes de entrar al santuario las personas, sobre todo las que van por primera vez a ese lugar, deben bailar con una corona de flores en la cabeza y al ritmo de una banda, mariachi o un simple violín y luego la corona se debe presentar al Señor de Chalma. De ahí que la utilicemos con gran frecuencia en estos tiempos; de cuando “ni yendo a bailar a Chalma se va a solucionar…la situación”.
¡La carne de burro no es transparente!
Quien no la usó siendo niño, era de lo más frecuente decirla en casa, en la escuela o en la calle con los amigos cuando alguien te impedía la visión de algo o alguien, sobre todo cuando te tapaban la tele era horrible.
¡Fierro pariente!
Es una frase muy utilizada en el norte del país y que actualmente ya se ha vuelto más popular en el país. En México la palabra “fierro” se refiere a un arma de fuego. El significado que se le da a esta frase es “arre” y se puede traducir como ¡ánimo! y “pariente” se refiere a una persona muy cercana a ti (primo, tío, hermano, etc.) por lo tanto cuando la utilizamos es para dar ánimos a un ser querido.
Estas son algunas de las frases que usamos, en otro momento buscaré más y se las comparto, pero por lo pronto ¡ya dejo de enchinchar! solo por un rato ¡fierro pariente! ¡Pásenla súper…! CM/PdC.