Desde hace tiempo tenía pendiente la lectura de Ocean Vuong. No solo porque su nombre ha resonado en el panorama literario, sino también porque tengo una debilidad especial por la literatura asiática. Y ahora Vietnam, en particular, ha captado mi atención gracias a autores como Kim Thúy, por lo que leer a Ocean Vuong se volvió necesario.
El dominio del lenguaje, la precisión en la elección de palabras y la capacidad de crear imágenes bellas les otorgan una ventaja única a “En la Tierra somos fugazmente grandiosos”. Ocean Vuong es primero poeta, esta, su primera novela, confirma la teoría de que los poetas tienen un manejo impresionante del lenguaje sobre el resto de los mortales.
”En la Tierra somos fugazmente grandiosos” no es solo una autobiografía disfrazada de ficción; es un relato conmovedor escrito con un lirismo que solo alguien con alma de poeta podría lograr. Aquí, Ocean Vuong despliega su historia sin velos, exponiendo con crudeza y belleza su vida como inmigrante, asiático y homosexual.
Desde el primer momento, el dolor impregna cada página, pero no es un dolor paralizante. Ocean Vuong lo transforma en fuerza y en un esfuerzo por encontrar paz y perdón. “En la Tierra somos fugazmente grandiosos” es una exploración profunda de la resiliencia: una búsqueda de luz en medio de la oscuridad. La trama se desenvuelve como una larga carta dirigida a su madre, que no sabe leer, donde el autor desmenuza episodios que marcaron su infancia, adolescencia y su paso a la adultez.
“En la Tierra somos fugazmente grandiosos” gira en torno al desarraigo: ser un vietnamita en Estados Unidos, enfrentar el racismo, la homofobia, y vivir una relación amorosa prohibida.
También se adentra en la relación compleja que mantiene con su madre, una mujer marcada por la violencia, que se gana la vida en un salón de manicura. A lo largo de “En la Tierra somos fugazmente grandiosos”, Ocean Vuong revela su amor, dolor y frustración por ella, destacando la dualidad de una relación que oscila entre el cariño y el castigo.
Uno de los aspectos más poderosos es el contraste que Ocean Vuong crea entre la brutalidad de su historia y la belleza del lenguaje. A pesar de lo crudo de las experiencias narradas, como los abusos sufridos y la pérdida del primer amor, cada palabra está cuidadosamente colocada para conmover, para hacer sentir al lector el peso del dolor pero también la promesa de la esperanza. Lágrimas, las necesarias.
Aunque “En la Tierra somos fugazmente grandiosos” no sigue un orden cronológico y los recuerdos se presentan de manera fragmentada, esto no le resta potencia, por el contrario: refuerza la sensación de caos emocional y de pérdida. La escritura de Ocean Vuong, con su estilo íntimo y poético, convierte este dolor en algo tangible, algo que se siente al leerlo.
Ocean Vuong es una voz poderosa que, con “En la Tierra somos fugazmente grandiosos”, se ha ganado un lugar destacado en la literatura contemporánea. Su obra, llena de cicatrices, es un testimonio de la lucha por sobrevivir, por encontrar un lugar en un mundo que, en muchas ocasiones, se empeña en silenciar a los que son diferentes. Imperdible.
Ocean Vuong (Ciudad Ho Chi Minh, antes Saigón, 1988) emigró a Estados Unidos con su familia en 1990, tras pasar un año en un campo de refugiados en Filipinas. En 2014 recibió la beca Ruth Lilly / Sargent Rosenberg de la Poetry Foundation y con el poemario Cielo nocturno con heridas de fuego ganó el Whiting Award y el Forward Prize en Estados Unidos y el Premio T. S. Eliot en Inglaterra. Sus textos se han publicado en medios como The Atlantic, Harper’s, The Nation, New Republic,The New Yorker y The New York Times. Es profesor en el Amherst College de Massachusetts. En la tierra somos fugazmente grandiosos es su primera novela. PdC.
Escrito por B. Del Ángel.