Uno va respirando por las calles quien sabe cuántas sustancias tóxicas que con razón a veces uno se siente mal. Y como no, si de acuerdo con la Organización de las Naciones Unidas (ONU), la contaminación atmosférica es el mayor riesgo ambiental para la salud humana.
Refiere que es una de las principales causas evitables de muertes y enfermedades en el mundo, responsable, hasta 2016, de aproximadamente 6.5 millones de fallecimientos prematuros atribuidos a ese fenómeno en interiores y al aire libre.
En su página electrónica destaca que en los países en desarrollo afecta de manera desproporcionada a mujeres, niños y ancianos, y en particular a las poblaciones de bajos ingresos que a menudo están expuestas a altos niveles de contaminación del aire en interiores y en espacios abiertos resultante de los métodos de cocina y calefacción que utilizan leña y queroseno.
El organismo internacional considera que la contaminación atmosférica es un problema mundial que tiene repercusiones de largo alcance debido a su vasta propagación y advierte que, si no se produce una intervención agresiva, el número de defunciones causadas por la contaminación del aire en sitios abiertos podría aumentar en más de 50 por ciento antes de 2050.
La ONU determinó que el tema de 2022 para esta efeméride es “El aire que compartimos”, es el tema de este año con motivo del Día Internacional del Aire que se conmemora el 7 de septiembre.
Todos respiramos el mismo aire, contamos con una atmósfera común que nos protege y sostiene. La contaminación es un problema global contra el que debemos actuar juntos, considera el organismo en su página electrónica. PdC.
Foto de Anna Romanova.