Lo que debes de saber de ese motor tan importante para la vida que es el corazón. Para empezar, la falta de actividad física y una alimentación saturada de grasas, carbohidratos y azúcares es más dañino para su buen funcionamiento que cualquier otra situación.
El corazón se mantiene activo a lo largo de toda nuestra vida de manera ininterrumpida, desde que nacemos hasta nuestro último suspiro, de ahí la importancia de brindarle los cuidados necesarios acorde a los requerimientos por edad, sexo o estado de salud física.
Por eso es importante acudir al médico de forma periódica y realizarse los estudios necesarios, ya que la falta de la salud cardiaca no da indicios de malestar hasta que deriva en complicaciones graves.
Alteraciones del sistema cardiovascular como la presión elevada y el colesterol alto son muy frecuentes en la población mexicana. De acuerdo con los registros más actualizados éstas tienen una alta prevalencia en México.
Cuando la presión elevada y el colesterol alto son diagnosticados tempranamente, éstos pueden revertirse gracias al tratamiento médico oportuno y a innovadoras terapias orales que están diseñadas para mejorar el funcionamiento del corazón y del sistema cardiovascular.
Tratamiento acompañado de una pieza clave, la alimentación; por medio de la comida ingresan al cuerpo vitaminas, fibra, nutrientes o ácidos grasos que contribuyen a reducir los niveles de colesterol en sangre, favoreciendo el buen funcionamiento del órgano motor del cuerpo.
Algunos de los alimentos que cuidan el corazón son:
El pescado, sus altos niveles de ácidos grasos Omega 3 presentes en éste, favorecen la disminución de la presión arterial. Además, su ingesta puede bajar los niveles de triglicéridos (grasa en la sangre).
Otro alimento que puede ayudar, es el aguacate, el cual mejora los niveles de colesterol LDL (conocido también como colesterol malo) en las personas con sobrepeso u obesas, disminuyendo factores de riesgo para padecer complicaciones cardiacas.
Y las sabrosas nueces, que en cantidades moderadas, mejoran el revestimiento de las arterias, reducen el riesgo de generar coágulos sanguíneos y disminuyen los niveles de inflamación asociados a enfermedad cardiaca.
No olvidemos, el corazón funciona 24 horas los siete días de la semana y por lo mismo, su cuidado debe ser igual. PdC.
Foto de Meli Di Rocco.