Todos en algún momento de nuestra vida hemos deseado sacarnos la lotería. Hay quienes si han visto hecho realidad su sueño, otros, que son la mayoría, solo han quedado en la desilusión.
Pero qué se necesita para sacarse la lotería. Primero comprar el billete, si sí, porque muchos desean obtener el Premio Mayor y no compran ni un “cachito”; después, tener muchísima, pero muchísima suerte, que el universo confabule a tu favor y la buena suerte toque a tu puerta.
O como dice don Gustavo, quien viene de una dinastía de vendedores de billetes de la Lotería Nacional, “hacerse el hábito de jugar siempre”, tener mucha paciencia porque esto de sacarse la lotería “no es rápido, es como una inversión; comprar aunque sea un cachito y seguir jugándolo y en cualquier momento sales ganador”.
Eso es lo que se necesita, y claro, tener buena suerte como la ha tenido él quien además de vender billetes de lotería los ha comprado, ha jugado y ha obtenido premios de 50 mil y hasta 80 mil pesos; porque “de que ganas, ganas” dice convencido de que la buena suerte aunque se tarda, pero llega.
No hay ritual para sacarse la lotería, solo es persistencia; “comprar un cachito, no guardarlo en el buró, tenerlo en un lugar visible, aprenderse el número con el que se juega y el día del sorteo pensar positivo: que vas a ganar, porque así es la vida, hay que jugártela a ganar siempre, la suerte llega…”
En su experiencia como vendedor de ilusiones, porque eso es lo que vende: sueños, deseos, ilusión, no un producto físico, tangible; vende “una probabilidad de ganar, de ganar dinero”, don Gustavo dice que los mejores números para jugar y ganar son el 7 y el 9.
“Muchos han ganado la lotería con esos números, premios de 100 mil pesos y hasta más grandes”, aunque también depende de la combinación de los números; sugiere escoger los que se repiten, pero eso sí, que no tengan muchos ceros porque es más difícil que salga ganador el billete, es de los números que no se venden.
Y a propósito de los billetes que no se venden, cuenta que una de las jugarretas de la vida fue haber regresado, porque no se vendió, la serie ganadora del Premio Mayor. Es lo peor que le ha pasado, platica, tener el billete con el número ganador: “lo tenía expuesto, nadie lo quiso y lo regrese…”
En su estanquillo don Gustavo vende billetes de lotería, “la reina del juego”, un negocio familiar que inició su abuelo en 1940 y que ha pasado de generación en generación, él junto con sus hermanos, son la cuarta; su padre lo enseñó como asesorar, como orientar, como convencer al cliente que compre un billete, hacer que tenga fe…
Él en su puesto fijo y sus hermanos como vendedores ambulantes de billetes, tienen al año tres fechas importantes cuando más les compran: los sorteos del 15 de septiembre, el del 24 de diciembre y el Guadalupano, aunque dice a Pláticas de Café que también tienen buenas ventas en los sorteos especiales.
Y tratándose de buenas ventas, todo depende también de la ubicación del punto en donde se expende y de sí hay crisis económica o no. “Para que las personas nos compren o no, tiene mucho que ver porque vendemos un producto que no es necesario, vamos de acuerdo de cómo se mueve la economía.
Si estamos en crisis o en recesión todos nosotros lo resentimos, lo vimos en la pandemia, las ventas se cayeron casi el 80 por ciento; apenas nos estamos recuperando, y sí, la economía tiene mucho que ver en el incremento de nuestras ventas”.
Gracias a que Don Gustavo tiene clientes fijos es que va saliendo en un negocio que aunque es de ilusiones, es bondadoso; al día llega a vender entre seis y hasta nueve series de 20 “cachitos” o billetes cada una.
“Mi venta principal son clientes fijos que compran series completas, eso es lo que nos ayuda a nosotros; tratamos de conseguir nuevos clientes que compren series completas y hacerlos fijos, les vendemos los mejores números”.
Con los clientes fijos se ayudan ellos, aunque también con las “albricias”, el regalo que la persona tiene a bien darles cuando gana el Premio Mayor. Es una regla no escrita que quienes ganan la lotería dan al vendedor el 10 por ciento sobre el premio.
Aunque también “depende del cliente es la cantidad, hay quienes dan el ocho por ciento; hoy un cliente de los que tengo fijos ganó 50 mil pesos y me regaló tres cachitos para que yo vaya a cobrarlos”.
Como ven, la clave para sacarse la lotería es comprar mínimo un “cachito” e insistir hasta que la suerte toque a nuestra puerta como el padre de don Gustavo que en tres ocasiones le tocó el Premio Mayor o como los clientes fijos que tiene nuestro entrevistado, quienes han ganado también grandes premios.
En su estanquillo ubicado en Insurgentes sur, don Gustavo termina su charla con Pláticas de Café diciendo que para ganar la lotería la clave “es jugar, jugar, insistir, insistir y tener fe, porque en cualquier momento llega” la buena suerte y nos ganaremos la lotería…
Y la respuesta al por qué no se saca uno la lotería, es más que obvia, primero porque solo deseamos ganar el Premio Mayor pero no compramos el billete y segundo porque a la primera que no sacamos nada, ni reintegro, nos desilusionamos y no volvemos a jugar.
Y bueno como ya nos dijo don Gustavo, la clave es insistir e insistir y comprar un billete que tenga el 7 o el 9, pensar siempre en positivo y de seguro un día los astros se alinearán y la buena suerte tocará a nuestra puerta. PdC.
Escrito por MM.