Son múltiples las causas que desencadenan el asma, una de las principales enfermedades no transmisibles que afecta a niños y adultos, aunque los primeros son los más vulnerables a este mal.
Pero ¿qué es él asma? Es un padecimiento crónico que provoca inflamación y estrechamiento de las vías que conducen el aire a los pulmones, lo que genera ahogo que podría derivar en ataques con consecuencias severas.
Por desgracia, las causas fundamentales del padecimiento no están esclarecidas y, por tanto, no tiene cura, dice el médico neumólogo, Gabriel Escobedo Arenas, académico de la Facultad de Estudios Superiores Iztacala de la UNAM.
Sin embargo, es controlable con la prescripción del tratamiento adecuado y el seguimiento de medidas dietéticas y de higiene para que los pacientes puedan disfrutar una buena calidad de vida.
El especialista explica que son múltiples las causas que pueden desencadenarla, incluso agudizarla, entre ellas la contaminación, algún alimento, también emociones fuertes que podrían generar crisis asmáticas; todo ello impide contar con un tratamiento específico.
Podría ser genético…
Podría tener un componente genético, por lo general el paciente tiene un familiar directo que lo presenta, o con algún tipo de alergia, o simplemente una rinitis.
“Puede ser que la mamá o el abuelo pudieran padecer alguna alergia dérmica o tópica, lo que implica la posibilidad de que un descendiente pudiera desarrollar asma”, comenta el neumólogo.
Los principales factores de riesgo son la combinación de una predisposición genética con la exposición ambiental a sustancias y partículas inhaladas.
Como los alérgenos dentro de las viviendas: polen, polvo, ácaros, caspa de mascotas, humo de tabaco, irritantes químicos o la contaminación atmosférica. Además de los estados de angustia, ansiedad y nervios que podrían originar la enfermedad, abunda.
En México, puntualiza, es la decimotercera causa de consulta en las unidades de medicina familiar, y afecta a cualquier población, en particular a niños y adolescentes, con mayor prevalencia en menores varones, mientras que en la vida adulta la padecen más las mujeres.
Se presenta comúnmente durante los cambios de temperatura –es cuando más se agudiza– y va acompañada de ciertos factores alérgicos, aunque en la adolescencia o en la vida adulta las alergias disminuyen su presencia, y el asma se presenta por otro tipo de causas.
“Recordemos que esta afección tiene un componente emocional importante, cuando una persona se angustia por la enfermedad el espasmo es más fuerte”, alerta. PdC.