¿Sabías que la sangre es un elemento a veces insustituible para salvar la vida y que la donación altruista contribuye a garantizar sangre segura?
Si eres de los que quieren donar, pero lo piensas mucho por temor a la falta de medidas higiénicas y de seguridad, no hay porque preocuparse.
Te platicamos que el sector Salud cuenta con tecnología de vanguardia para la obtención de sangre segura, libre de agentes infecciosos como el virus de inmunodeficiencia humana (VIH) o hepatitis C, sífilis y chagas, entre otros.
Existen 556 bancos de sangre distribuidos en todo el país, donde las personas pueden acudir a donar; “cada unidad de 450 mililitros salva hasta tres vidas”.
Estos centros de recepción de plasma cuentan con moderna tecnología, licencia sanitaria y lineamientos emitidos por la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris) y por el Centro Nacional de la Transfusión Sanguínea, que establecen la disposición de sangre humana y sus componentes con fines terapéuticos.
La sangre es un elemento a veces insustituible para salvar la vida. Es un recurso para mejorar la salud de pacientes en terapia intensiva o que serán sometidos a procedimientos quirúrgicos de alto riesgo, quienes requieren concentrados, plaquetas, plasma fresco, congelado y otros componentes sanguíneos.
En países desarrollados existe conciencia ciudadana sobre la donación altruista, y esto se debe a la cultura y educación. En México, la mayoría de las unidades obtenidas en los bancos de sangre es por reposición; es decir, proveniente de familiares o personas conocidas de pacientes hospitalizados.
La mayoría del plasma que se obtiene de las donaciones es de grupos sanguíneos positivos; de tipo negativo es raro y muy pocas personas acuden a donar; esto ocasiona déficit permanente y cuando un paciente con tipo negativo requiere una transfusión, se recurre a depósitos en otros hospitales para salvar su vida.
No pongamos pretextos para no donar, que porque estamos enfermos o tatuados o porque llevamos un tratamiento…por ejemplo, las personas con trastornos del colesterol y de los triglicéridos, aunque se encuentren bajo tratamiento, pueden donar sangre si están estables y cumplen con el resto de los requisitos.
También lo pueden hacer quienes padecen trastornos de ansiedad o depresión, siempre y cuando tengan un tratamiento con máximo dos fármacos y te mantenga estable; así como usuarios de CBD, claro, también cumpliendo con el resto de los requisitos. PdC.