Existe una enfermedad que provoca anemia y fatiga, llamada Talasemia. De seguro te estarás preguntando ¿de qué se trata, en qué consiste, cómo se adquiere este mal?
La hemoglobina es una proteína de los glóbulos rojos que permite que estos transporten oxígeno de los pulmones al resto del cuerpo. Cuando los niveles de esta proteína no son los normales, es signo de que hay un problema en la sangre, en este caso llamado Talasemia.
La talasemia es un trastorno sanguíneo hereditario que hace que el cuerpo tenga menos hemoglobina de lo normal, lo que puede causar anemia y sentirse fatigado. Esta enfermedad va de la leve hasta la más grave.
Los síntomas dependen del tipo y la severidad de la afección, pero la persona puede presentar fatiga, debilidad, piel pálida o amarillenta, deformidades óseas faciales, crecimiento lento, hinchazón abdominal y orina oscura.
Algunos bebés muestran signos y síntomas de talasemia al nacer; otros los desarrollan durante los dos primeros años de vida. Algunas personas que solo tienen un gen de la hemoglobina afectado no tienen síntomas de la enfermedad.
Una de tus preguntas ha de ser ¿qué la causa?, de acuerdo al sitio de Mayo Clinic, este trastorno es causado por mutaciones en el ADN de las células que producen hemoglobina, la sustancia en los glóbulos rojo que transporta el oxígeno por todo el cuerpo.
Y bueno, no es una enfermedad que se contagie, desafortunadamente, las mutaciones asociadas con la talasemia se transmiten de padres a hijos.
Las moléculas de hemoglobina están formadas por cadenas llamadas cadenas alfa y beta, que pueden verse afectadas por mutaciones. En la talasemia, la producción de las cadenas alfa o beta se reduce, lo que genera alfa-talasemia o beta-talasemia.
En la alfa-talasemia, la gravedad de la talasemia depende del número de mutaciones genéticas que se hereda de los padres. Cuanto más mutados estén los genes, más grave será la talasemia.
En la beta-talasemia, su gravedad depende de la parte de la molécula de hemoglobina que esté afectada.
Como comentamos, no es un padecimiento que se contagie, pero existen factores que aumentan el riesgo de sufrirla como son los antecedentes familiares, ya que se transmite de padres a hijos a través de genes de hemoglobina mutada.
Otro factor es la ascendencia, es decir, ocurre con mayor frecuencia en afroamericanos y en personas de origen mediterráneo y del sudeste asiático. PdC.