Cuando donas salvas muchas vidas porque tu sangre es un fluido que provee a las células y tejidos de sustancias esenciales como oxígeno, azúcares, nutrientes y hormonas. También remueve los materiales de desecho que no son necesarios, como dióxido de carbono, urea y ácido láctico.
Tus plaquetas contribuyen a la formación de coágulos que ayudan a sanar heridas y prevenir el sangrado; los glóbulos rojos están a cargo del transporte de oxígeno y los glóbulos blancos ayudan a combatir infecciones y otras enfermedades. Son especialmente útiles para auxiliar a las personas con cáncer y problemas sanguíneos.
Tu plasma, que es la parte líquida de la sangre, contiene proteínas, hormonas, vitaminas, colesterol (del bueno), azúcar y minerales.
Por eso es importante que demos un poco de vida para aquellos que la necesitan.
La donación es cada vez más sencilla, existen bancos de sangre que reciben a las personas voluntarias durante las 24 horas del día, solo se les pide ayuno mínimo de cuatro horas antes del procedimiento para evitar que se llene de grasas, explica la académica de la Facultad de Medicina (@FacMedicinaUNAM), Norma Candelaria López Santiago.
Por si decides donar, te comentamos que ya está aquí la Semana del Donante Voluntario de Sangre y sus Componentes, ésta se realiza la segunda semana de junio de cada año.
¡Ah! y si te preocupa que tuviste COVID-19, no hay problema, pues de acuerdo a la especialista Norma López Santiago de la División de Estudios de Posgrado de la Facultad de Medicina (@FacMedicinaUNAM), no existe ninguna contraindicación por infección de SARS-CoV-2 para proporcionarla.
Explica que hasta el momento no está demostrado que la enfermedad se transmita por vía sanguínea. Platica que de acuerdo con su experiencia en el Instituto Nacional de Pediatría, se registraron algunos casos de donadores, quienes pocos días después de hacerlo notificaron que padecían la COVID-19.
Ese hecho provocó que la sangre fuera revisada nuevamente sin encontrar ningún problema en ella. PdC.