Una de mis hierbitas favoritas es el laurel, tanto para aromatizar algún alimento o prepararme un té, como para hacer rituales para atraer la buena suerte, éxito, prosperidad y abundancia.
En lo personal una vez al mes yo quemo unas hojas de laurel caminando por toda mi casa para ahuyentar las más malas energías y atraer prosperidad.
Aquí algunos de mis rituales que hoy compartiré contigo, espero alguno te funcione.
Duerme con algunas hojas de laurel debajo de la almohada cuando tenga alguna situación importante que resolver al día siguiente, te ayudará a darte claridad y te será sencillo tomar una decisión importante, pues además te ayuda a trabajar la intuición.
En el pasado, era costumbre de nuestros ancestros quemar hojas de laurel en los hogares para purificar el aire y el medio ambiente; se creía que así se invitaba a las malas energías a salir de casa y darle la bienvenida a la abundancia y felicidad; este ritual lo hago una vez al mes o cuando siento pesadez en mi hogar.
Además, al mismo tiempo que prendes fuego a las hojitas de laurel, el humo que desprende es rico en cineol y eugenol, su inhalación ayuda a aliviar el dolor de cabeza, limpiar las vías respiratorias y relajar el cuerpo y la mente.
O qué tal un baño mágico con infusión de laurel para proveer la ganancia financiera, atrayendo la prosperidad y evitando la envidia.
Ahora bien, si esa infusión nos la tomamos, nos va a ayudar a despertar nuestros sentidos; también es excelente para eliminar líquidos, limpiar los riñones y reducir los niveles de ácido úrico en el organismo, además de que contribuye en este sentido a bajar de peso por causas como la retención de líquidos, disminuye la inflamación por flatulencias y las dolencias de cólicos.
Ahora sí, por donde quieras ver al laurel, tiene todo bueno. Recuerda nada en exceso todo con medida.
Conociendo todos sus beneficios ¿qué usos le vas a dar a esta hierbita mágica?
La información que manejamos aquí no tiene la intención de ofrecer tratamientos médicos, el uso que se le dé es responsabilidad estricta del lector. VTL/PdC.