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Parque Izta-Popo, área protegida más antigua

¿Has escuchado hablar de la rana Leopardo de Moctezuma, del conejo de Los Volcanes o del murciélago Mula Mexicano o de la flor de Guegueche, del enebro azul o de la soromuta?, seguramente no, pero lo que debes saber es que son especies que no se encuentran en otro lugar del mundo, salvo en el Parque Nacional Iztaccíhuatl-Popocatépetl.

Es por eso, que por su biodiversidad y por los grandes beneficios ambientales que aporta a la región, es que el Izta-Popo fue declarado Parque Nacional el 8 de noviembre de 1935 y en 2010 la UNESCO lo clasificó como Reserva de la Biosfera con una superficie más extensa, de 172 mil hectáreas.

Te platicamos que el parque nacional Izta-Popo es reconocido por su destacada biodiversidad y la riqueza de sus ecosistemas, que aportan tanto servicios ambientales como bienes faunísticos, vegetales y minerales que han sido aprovechados por los habitantes de la región de los volcanes y su área de influencia.

En los valles que rodean a estas montañas, los pobladores indígenas domesticaron plantas como el maíz, la calabaza, el frijol, el chile y el amaranto, alimentos que hoy siguen siendo el sustento de la dieta local.

Este parque de 40 mil hectáreas, ubicado en los estados de México, Puebla y Morelos, forma parte de la Sierra Nevada y es una de las áreas protegidas más antiguas de México.

Fue una extensa región cultural en la época prehispánica. Varias montañas, particularmente el Popocatépetl, el Tláloc y el Iztaccíhuatl eran veneradas como dioses, y en ellas se celebraban ritos dedicados a las deidades del agua.

Por su posición geográfica y características, este parque nacional es un importante reservorio de especies de hongos, flora y fauna silvestres. Al ser parte de una gran cadena montañosa se presenta un alto índice de endemismos, es decir que es poseedora de 18 especies exclusivas de esta región.

Su variedad faunística es amplia y destacan varias especies endémicas (exclusivas de esta zona) como: la rana Leopardo de Moctezuma, el chipe Rojo, la culebra Parda Mexicana, el conejo de Los Volcanes, el mirlo Pinto, el murciélago Mula Mexicano, el saltaparedes y el vencejo Nuca Blanca, entre muchos otros.

También cuenta con flora endémica como el cebollín, el zacate de Escobillas, la flor de Guegueche, el enebro azul, la soromuta  y el gordolobo. Su vegetación se caracteriza por bosques de coníferas y encinos, pastizales y vegetación inducida.

El Parque Nacional Iztaccíhuatl-Popocatépetl, encierra un gran simbolismo ya que durante siglos se gestó la leyenda del Idilio de los Volcanes que da vida humana y heroica a estas elevaciones.

Los volcanes Popocatépetl e Iztaccíhuatl forman parte de la Sierra Nevada y poseen hermosos paisajes boscosos de pino, encino y oyamel, además es hábitat de venados cola blanca, gallinas de monte, conejos teporingo o zacatuche y charas, entre otras especies.

Los nombres de estos volcanes provienen del náhuatl: Popocatépetl significa “cerro que humea” (popoca, que humea, y tépetl, montaña), e Iztaccíhuatl, mujer blanca: Iztac, “blanca”, y cíhuatl, mujer.

El parque Izta-Popo es un sitio ideal para los alpinistas que pueden ascender las cumbres nevadas. Para otros visitantes es mejor la caminata, el senderismo, el ciclismo de montaña, acampar o disfrutar de un día de campo.

Desde Paso de Cortés se pueden observar el Pico de Orizaba, La Malinche, el Nevado de Toluca y la Sierra de las Cruces, lo mismo que los valles de Puebla, Tlaxcala y la gran cuenca de México.

Después de un largo periodo de cierre obligado en las Áreas Nacionales Protegidas (ANP), el Parque Nacional Izta-Popo se reactivó bajo un esquema de nueva normalidad que impuso la contingencia generada por la pandemia de COVID-19, te lo comentamos por si deseas visitar este parque nacional. PdC.

 Foto tomada de la página de la Semarnat.

 Con información de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat).

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