Estamos a 3 días de nuestra “Noche Mexicana”; ya se comienza a pensar en el o los platillos que se van a preparar para el gran evento. Se elabora de todo, que si los sopes, las tostadas, las quesadillas, los tacos, los guisos en fin…pero lo que nunca falta es el pozole, del estilo que sea, pero lo cierto es que nunca falta en la mesa de un mexicano.
Pero ¿qué sabemos de este platillo, además de que es riquísimo cuando se combina en boca el sabor del maíz, el chile, la lechuga, los rábanos, el orégano y los deliciosos trocitos de la carne de cerdo?
¿Sabías que el pozole es de origen prehispánico, que existen más de 10 tipos y que el ingrediente principal es la carne de cerdo? ¡mmmm, que rico! ya hasta se me antojó y de seguro a ustedes también.
Mientras llega el día para disfrutar al menos de un gran plato…les vamos a compartir la información que MSD Salud Animal en México hizo llegar sobre el tema.
El pozole es uno de los platillos más icónicos de México. La palabra viene del náhuatl “pozolli” que significa “espumoso”.
Se estima que su creación se remonta a la época prehispánica (1300-1521), cuando el pozole era preparado para el emperador Moctezuma y que, al mismo tiempo, era ofrendado al Dios Xipe Tótec, señor de la fertilidad y la regeneración del maíz y la guerra.
La tradición de comer pozole en septiembre está relacionada con la cosecha del maíz de la variedad conocida como cacahuazintle, época ideal para su cosecha.
Además, otro de los ingredientes principales en esta preparación es la carne de cerdo, proteína con gran aceptación en nuestro país, ya que, de acuerdo con datos del Consejo Mexicano de la Carne, el consumo nacional por persona es de aproximadamente 22 kilogramos.
Y es que la carne de cerdo es un ingrediente común en la dieta mexicana y gracias a las medidas sanitarias del sector porcícola que incluye la mejora en la alimentación y salud de los cerdos, la calidad nutricional de esta proteína ha aumentado.
Y de esta mejora se encarga MSD Salud Animal en México, pues su compromiso es fomentar la seguridad alimentaria y el bienestar de los animales y las personas.
Luego de este pequeño breviario cultural, sigamos con lo del pozole, uno de los principales referentes de la gastronomía mexicana y que durante las Fiestas Patrias aumenta su preparación y consumo.
Con el transcurso de los años, la receta de este riquísimo platillo se ha adaptado de acuerdo con las tradiciones y sabores de todos los estados del país. Actualmente se conocen más de 10 estilos de pozole mexicano preparados con carne cerdo y diversos granos, dos ingredientes indispensables en su preparación.
A continuación, te presentamos las recetas más populares en México.
Pozole verde blanco y rojo. Son los estilos más populares del país y sus ingredientes principales son un caldo como base del platillo, carne de cerdo, maíz cacahuazintle, hierbas de olor, lechuga y rábanos. El color dependerá del chile con que se condimente; chiles frescos y tomate para el verde y chile ancho y guajillo para el rojo.
Pozole mar y tierra. Este estilo viene de las costas de Colima, Nayarit y Jalisco, cuyo principal ingrediente es el caldo de camarón, combinado con manteca y carne de cerdo, pulpo, camarón y almejas.
Pozole de frijol. Preparación popular de Guerrero, también conocido como “Camagua”. Destaca la presencia de elote en trozos o desgranado, frijol negro, epazote y carne de cerdo.
Pozole batido. Esta receta es tradicional de Michoacán y se prepara con maíz colorado y carne de cerdo, en algunas regiones del estado se incluye pinole para que espese o bien, se cuecen los granos de maíz hasta que se desintegran, dando la textura deseada.
Pozole jalisciense. Es una de las versiones de pozole rojo más icónicas del país, color obtenido por la mezcla de chiles puya y guajillo; la carne de cerdo es la proteína ideal para esta receta.
Pozole de elote. Michoacán y Jalisco son los estados creadores de este pozole preparado con carne de cerdo que, en lugar de maíz cacahuazintle se añaden granos de elote.
Pozole de trigo o garbanzo. Es común encontrar esta receta en el Estado de México, Michoacán y Sonora; se prepara con trigo en grano o garbanzos, calabaza, nopal, cebollas, zanahoria, verdolagas, rábano y chiles verdes. Los Yaquis, pueblo de Sonora, acostumbran a elaborarlo con manteca y carne de cerdo.
La carne de cerdo es rica no solo en sabor, también en una buena fuente de proteínas, vitaminas B6, B12, tiamina, niacina, riboflavina y ácido pantoténico, compuestos fundamentales para el desarrollo humano.
Antes se tenía el mito que la carne de cerdo era dañina, de hecho hay una máxima popular que reza: “es tan malo como la carne de cerdo”, pero las medidas sanitarias aplicadas a la crianza de este animal lo hacen seguro para su consumo.
Así que si te detiene el deleitarte con un gran plato de pozole, por aquello de la carne de cerdo, un ingrediente principal, ya no más, pues como dice Raúl García, Gerente Técnico de la Unidad de Porcicultura de MSD Salud Animal en México, las herramientas innovadoras en la crianza y producción del cerdo garantizan la seguridad y sanidad alimentaria de la población. PdC.