Estamos en un mes en el que queremos hablar de esas grandes mujeres del pasado y del presente que no obstante la gran participación en diversas áreas de la sociedad, por alguna razón no se les ha reconocido su labor, como es el caso que me trae en esta ocasión.
La mujer que ahora nos ocupa vivió durante la Revolución de México, tuvo un papel importante y no se le dio o se le ha dado el lugar en la historia que merece.
Fue un poco complicado encontrar información completa, hasta que como siempre, uno va a Wikipedia.org y ahí pude saber más.
Petra Herrera o Pedro Herrera como se le conoció también, nació el 29 de junio de 1887, fue una heroína y “soldada” de la insurgencia durante la Revolución Mexicana, y se autonombraba “Generala”.
Durante esa época de nuestra historia había mujeres que seguían a sus hombres y eran nombradas “soldaderas”; ellas aunque se ocupaban de tareas domésticas, revestían gran importancia, pues eran las que se encargaban de la logística en general: preparaban la comida con la que iban a hacer alimentado todo el regimiento, acicalaban las zonas destinadas al descanso, curaban a los heridos en combate, etc.
Y es aquí que Petra Herrera para poder entrar en batalla tuvo que hacerse pasar por hombre y adoptó el nombre de “Pedro Herrera” y de esta forma pudo ingresar a la tropa de Pacho Villa.
Dirigió las tropas maderistas en la primera toma de la Batalla de Torreón en mayo de 1911 y sacó a las fuerzas federales. Gracias a esto su nombre quedó plasmado en un corrido “La valiente Petra Herrera en el fragor del combate aunque cayó prisionera ni se dobla ni se abate”, “La valiente Petra Herrera al combate se lanzó, siendo siempre la primera, ella el fuego comenzó”.
El 30 de mayo de 1914 junto a 400 mujeres interviene en la segunda batalla de Torreón. Su estrategia de ataque consistía en explotar puentes además de tener una gran capacidad de liderazgo. Uno de sus triunfos más importantes fue la Batalla de Torreón de 1914.
Al revelar su verdadera identidad ya había ganado gran renombre en las batallas por lo que no sufrió discriminación por parte de sus compañeros.
Pero a pesar de su gran intervención en la toma de Torreón no fue oficialmente reconocida; se dice que Villa ocultó su participación y se negó a darle crédito militar por ser mujer y no la promovió como General; por este motivo abandona las fuerzas de Villa para conformar su brigada exclusivamente con soldaderas.
En 1917 se alió a Venustiano Carranza, convirtiéndose en una leyenda para las mujeres del país. Siempre se le negó ascender al rango de general, a pesar de su notable habilidad en el campo de batalla, no obstante se le ascendió al puesto de coronel por el general Jesús Agustín Castro.
Al desintegrarse su ejército femenino por órdenes superiores, Petra Herrera trabajó como espía bajo el disfraz de moza en una cantina de Chihuahua. Una noche un grupo de bandidos ebrios, la insultaron y le dispararon, a pesar de sobrevivir al ataque, muere a consecuencia de las heridas el 14 de febrero de 1917.
Una mujer que tuvo que luchar doblemente, por un lado el machismo y por otro, en batalla. A pesar de su gran trabajo, no se le dio el reconocimiento a todo el esfuerzo que realizó en la lucha revolucionaria. Su nombre se ha perdido en la historia y es importante que la reconozcamos en toda su valía. CM/PdC.