Si has tenido una contracción repentina e involuntaria de uno o más músculos, bueno para darme a entender, quienes han tenido un calambre en pantorrillas o manos ya sea en el día o en la noche es porque te faltan minerales o estás deshidratado, entre otras causas.
¿Qué hacer para evitarlos?, bueno antes de saber cómo escapar de los molestos y doloroooosos calambres, veamos primero qué los provocan, igual y no son tan inofensivos como parecen.
En su página electrónica, Mayo Clinic refiere que la mayoría de los calambres se manifiestan en los músculos de las piernas, en particular, en las pantorrillas.
Es indudable no pensar que se tiene un calambre, cuando además del dolor repentino, agudo e intensooo, también se siente y a veces aparece un bulto duro de tejido muscular debajo de la piel.
Bueno, pues, esto sucede porque quizá hemos tenido períodos prolongados de ejercicio o de trabajo físico, especialmente si hace calor; o a lo mejor le hemos dado uso excesivo a un músculo.
La deshidratación también puede ser otra causa, al igual que la tensión muscular o el solo hecho de mantener una posición por un período prolongado pueden causar un calambre muscular. Sin embargo, en muchos casos no se sabe cuál es la causa.
Algunos medicamentos y enfermedades también los pueden causar. Si bien la mayoría de los calambres musculares son inofensivos, algunos pueden estar relacionados con enfermedades no diagnosticadas, tales como:
*Suministro de sangre inadecuado. El angostamiento de las arterias que llevan sangre a las piernas (arterioesclerosis de las extremidades) puede producir un dolor similar al de los calambres en las piernas y en los pies al hacer ejercicio. Estos calambres a menudo desaparecen poco después de terminar los ejercicios.
*Compresión de los nervios. La compresión de los nervios en la espina dorsal (estenosis lumbar) también puede producir un dolor similar a los calambres en las piernas. Usualmente el dolor empeora cuanto más caminas. Caminar en una posición levemente flexionada (como cuando empujas un carrito de compras) puede mejorar o retrasar el comienzo de los síntomas.
*Disminución de minerales. Una cantidad insuficiente de potasio, calcio o magnesio en tu dieta puede contribuir a los calambres en las piernas. Los diuréticos (medicamentos a menudo recetados para la presión arterial alta) también pueden disminuir estos minerales.
Aparentemente los calambres son inofensivos, claro sin tomar en cuenta lo molestos y dolorosos que son, sin embargo hay factores que aumentan el riesgo de padecerlos que puede ser la edad, deshidratación, embarazo y algunas afecciones.
Edad. Las personas mayores pierden masa muscular, por lo que el músculo restante puede sobre exigirse con más facilidad; deshidratación, con frecuencia, los atletas que se fatigan y deshidratan al practicar deportes en climas cálidos padecen calambres musculares.
Embarazo, los calambres también son frecuentes durante el embarazo; afecciones, se puede tener más riesgo de sufrirlos si se tiene diabetes o trastornos nerviosos, hepáticos o tiroideos.
Generalmente desaparecen por sí solos y se pueden tratar en casa con medidas de cuidado personal, pero más vale consultar al médico si causan molestia intensa; hay hinchazón, enrojecimiento o cambios de la piel en las piernas.
O si están relacionados con la debilidad muscular; suceden a menudo; no mejoran con el cuidado personal; y si no están relacionados con una causa obvia como por ejemplo el ejercicio extenuante.
Mayo Clinic refiere que estas medidas pueden ayudar a prevenir los calambres:
Evita la deshidratación. Bebe abundante líquido todos los días. La cantidad depende de lo que comas, de tu sexo, del nivel de actividad, del clima, de tu salud, de tu edad y de los medicamentos que tomes.
Los líquidos ayudan a que los músculos se contraigan y relajen, y mantienen las células musculares hidratadas y menos irritables. Durante la actividad, reabastece los líquidos a intervalos regulares y continúa bebiendo agua u otros líquidos después de terminar.
Elonga tus músculos. Elonga (estirar) antes y después de usar cualquier músculo por un período prolongado. Si tienes tendencia a tener calambres en las piernas por la noche, hacer estiramientos antes de acostarte. Hacer ejercicio ligero, como usar la bicicleta fija por unos minutos antes de acostarte, también puede ayudarte a prevenir los calambres mientras duermes. PdC.