Hace unas décadas cuando una mujer o un hombre llegaban a la “edad del matrimonio” era muy común escuchar a los padres decir: “ya es hora de que te cases para que me des nietos”, o bien a la pareja recién casada, decirles: “cuándo nos van a dar un nieto… ya es hora de que nos den un nieto… ya se está pasando el tiempo para que nos den un nieto….”. Ahora las circunstancias han cambiado; las nuevas generaciones toman la paternidad más como una elección que como una obligación.
En cuestión de responsabilidades sobre los hijos, pareciera que las mujeres asumen más el compromiso que un hombre, y no es que no lo hagan, pero se aprecia más en ellas, pues sucede que las mujeres de manera innata van desarrollando desde pequeñas el instinto materno, desde el juego, desde los roles que se van escogiendo.
Incluso desde las expectativas de los padres, de las expectativas sociales, señala la especialista en psicología Claudia Sotelo Arias, quien nos dice que más que responsabilidad, ella lo consideraría como de mayor identificación, de mayor arquetipo, incluso social; pues se espera que las mujeres sean mamás si o si, y esto facilita la crianza, el compromiso y la responsabilidad que se tiene hacia los hijos.
La experta considera que cuando un padre se asume como un hombre responsable de su paternidad, más que verla como una atadura, la ve como un compromiso inamovible que lo va a acompañar toda su vida.
A propósito del Día del Padre, que hoy se celebra, la doctora Claudia Sotelo, directora del Centro de Especialización en Estudios Psicológicos de la Infancia (CEEPI) comenta a Pláticas de Café sobre los tipos de papás que hay: el autoritario, el rígido, el tradicionalista y el “blandito”.
Del autoritario refiere que es el que ejerce la violencia física o verbal para hacerse entender; el blandito, aquel que se hace amigo de los hijos, que no puede distinguir la jerarquía de ser padre y se pone como un igual.
Considera la existencia de otro tipo de padre, el ausente; el que está metido en el trabajo y que no está presente en las actividades de los hijos, lo que lleva a una distancia emocional entre ellos.
Aunque en esto de la paternidad no todo está perdido, pues señala que hoy en día existen padres que tienen más madurez, más gusto y más deseo de ser padres.
Afortunadamente, añade, los jóvenes y los hombres que van decidiendo ser padres, lo hacen con mayor conciencia, con mayor gusto; lo que les va a dar mayor cercanía afectiva con sus hijos.
“Hoy en día es muy común que papá se haga cargo de muchas actividades que antes no hacía, incluso de la crianza; hoy es muy común que se involucren en las actividades académicas, en las actividades extraescolares y que estén como muy cercanos de sus hijos”.
La doctora en psicología dice que “esto afortunadamente es algo positivo porque hemos dejado de lado la rigidez y nos hemos vuelto una sociedad que va creando padres que leen, padres que se informan y padres que pueden ser más conscientes sobre su función de paternanaje”.
Y así es, en una pequeña encuesta entre jóvenes sobre lo que piensan de la paternidad, nos dimos cuenta que están más conscientes de ello, pues consideran que llevar el cuidado y la guía de una “personita” es una responsabilidad “muy fuerte”.
Y que cuando ellos tomen la decisión de tener hijos, lo que harán como padres será motivar su creatividad e independencia; apoyar y respetar sus decisiones; no dejarán que crezcan solos y sin apoyo. Quieren ser una guía para que sus hijos se desarrollen como personas responsables y buenas. PdC.
Escrito por MM.
Foto Rodnae Productions
