Cuando tenemos una situación de estrés, la compensamos comiendo de más y nada nutritivo. Si tenemos mascota, hacemos lo mismo: si no le dimos atención o no jugamos con ellos o si no tuvimos tiempo de sacarlo a caminar, lo arreglamos con comida y premios.
Los expertos dicen que es algo contraproducente pues el exceso de comida y el no sacarlos a correr contribuye a que la mascota vaya ganando peso; de esta forma su salud se irá deteriorando y como consecuencia disminuir su esperanza de vida.
En los casos cuando la mascota está pasada de peso, que obviamente un especialista debe de determinar, hay que seguir ciertas recomendaciones, para empezar, regular la cantidad de comida que ingiere.
El académico de la Facultad de Estudios Superiores (FES) Cuautitlán, de la UNAM, Gerardo Garza Malacara, señala que “los veterinarios tenemos el compromiso con los tutores de recomendarles el tipo de alimento de acuerdo con cada animal, su estilo de vida, la etapa de vida en que se encuentra y su estado fisiológico”.
Menciona que con la orquiectomía (castración de machos) y la oforosalpingohisterectomía (consistente en retirar ovarios y útero) en el caso de las hembras –procedimientos quirúrgicos llamados comúnmente “esterilización”– ya no se requiere tanta energía para la producción respectiva de espermatozoides y óvulos, por lo que es necesario disminuir en 10 por ciento la cantidad de alimentos que ingieren. Si no se hace este ajuste, “vamos a tener mascotas con tendencia a la obesidad”.
Explica que en numerosas ocasiones los tutores de las mascotas leen las etiquetas del alimento, pero no las saben interpretar. “Con un cálculo matemático se obtiene el requerimiento energético diario, no comida. Esa cantidad se puede fraccionar en dos o tres alimentos al día, para que la mascota no tenga por tanto tiempo el estómago vacío y coma con mayor tranquilidad”.
Un error común es comprar alimentos bajos en grasa y proporcionar la cantidad de acuerdo con el peso que tiene el perro, cuando lo correcto es calcular la cantidad en relación con el peso ideal que debería tener.
Como métodos de prevención de la obesidad, el universitario recomienda visitar el médico veterinario para que determine el tipo de alimento que el tutor pueda adquirir. “Muchas veces argumentan que son caros, pero hay que considerar que con los superpremium se le da menor cantidad de alimento y va a estar mejor nutrido”.
El médico puede hacer un cálculo de cuánto, cómo y cuándo debe comer la mascota y el tipo de alimento; hay perros alérgicos al pasto, por ejemplo, que requieren como apoyo uno hipoalergénico.
El especialista Gerardo Garza exhorta a la gente a hacer ejercicio con sus perros, darles de comer a sus horas y en la cantidad adecuada para mantenerlos en el peso ideal y alargar su vida. PdC.
Foto de Gustavo Fring.