Al Paciente con Amor

¿Dolor…? señal de que algo anda mal

Todos en algún momento hemos sentido dolor, ya sea de cabeza, estómago, de pies, de espalda, pero ¿qué es el dolor, es un síntoma, es una enfermedad…?

Para empezar, es una sensación que incomoda, dependiendo qué tan leve o fuerte sea puede ser muy desagradable al punto que como se dice coloquialmente “nos dobla”.

Los expertos nos dicen que el dolor es un síntoma de alarma; una señal del sistema nervioso de que algo no anda bien.

Es una sensación como de pinchazo, hormigueo, picadura, ardor o molestia; agudo, intermitente o constante; se puede sentir en alguna parte del cuerpo o ser generalizado.

Esa sensación desagradable que llamamos dolor, es una señal que ayuda a diagnosticar la presencia de alguna enfermedad; sin éste, uno podría lastimarse y no darnos cuenta o tener algún padecimiento grave que requiere atención inmediata y no saberlo.

Aunque nos resulte molesto sentirlo, pero es un síntoma que nuestro organismo emite para ponernos en estado de alerta.

Hay dos tipos de dolor: agudo y crónico. Se mide de acuerdo a la intensidad, en una valoración del cero al diez siendo entre siete y diez lo más extremo.

En general, el dolor agudo aparece de repente, debido a una enfermedad, lesión o inflamación. A menudo puede ser diagnosticado y tratado.

El dolor agudo, generalmente desaparece, aunque a veces puede convertirse en dolor crónico, el cual dura mucho tiempo y puede causar problemas graves.

El dolor no siempre es curable, pero hay muchas formas de tratarlo. El tratamiento depende de la causa y el tipo de dolor.

Los dolores que van en la escala del siete al 10, que ya son extremos, se presentan en males como la cefalea en racimos, se caracteriza por un dolor muy intenso que incapacita a la persona y la obliga a recostarse en su cama.

“Es considerado de los más fuertes que puede sufrir un ser humano”, señala Miguel Jiménez Olvera, de la Unidad de Servicio de la Clínica para el Dolor y Cuidados Paliativos del Hospital General.

Las fracturas de cualquier hueso, desde el fémur, las vértebras, las costillas, donde en su etapa más aguda suelen causar un dolor muy intenso. O los distintos tipos de cáncer donde los tumores de metástasis causan dolores muy intensos.

El especialista Miguel Jiménez refiere que las neuralgias cráneo-faciales como la del trigémino y glosofaríngeo son enfermedades menos comunes, pero provocan un dolor muy intenso. “Es llamado el dolor del suicida, porque no se puede vivir padeciéndola”.

Ahora que ya sabemos que el dolor es una señal de que algo le pasa a nuestra salud, es importante tomar muy en cuenta que cualquier tipo de dolor presentado no debe dejarse pasar por alto, pues cualquier malestar es síntoma de alarma.

Y como señala el experto en dolor, “no debemos automedicarnos, siempre que tenemos un dolor debemos acudir al médico para que identifique cuál es la causa, y de acuerdo a estudios previos, determine el diagnóstico y así establezca el tratamiento adecuado”.

Cuando nos automedicarnos muchas veces pasamos por alto la enfermedad, y al principio pareciera que fue tratada correctamente. No obstante, el padecimiento podría evolucionar y complicarse gravemente. Cualquier tipo de dolor ya sea leve, moderado o severo, debemos acudir oportunamente al médico, alerta el especialista. PdC.

 Con información de UNAM Global y Medlineplus.

 Foto de Towfiqu barbhuiya.

 

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