La Loca del Gato y otras

No llores, aquí estoy

Cuando regreso a casa, no importa si son cinco minutos o cuatro horas, Maya y Wera me reciben como si las hubiera dejado una eternidad, eso me hace sentir muy halagada. Sin embargo, he visto noticias o videos en donde los peludos “lloran”, me imagino que de alegría cuando ven a alguno de su manada humana que tiene tiempo de no verlo, ya sea porque se perdieron o porque se separaron por algún motivo.

Eso me ha dado que pensar y como siempre me acomodé y con computadora en mano me puse a investigar en master Google para ver si en verdad los lomitos lloran y viendo varias publicaciones encontré en Ondacero.es lo siguiente.

Un equipo de investigadores de la Universidad de Azabu, en Japón, descubrió que los ojos de los perros se llenan de lágrimas cuando experimentan emociones positivas, como reencontrarse con los miembros de su manada humana.

Sus ojitos se llenan de lágrimas cuando experimentan emociones positivas, por ejemplo, al reencontrarse con alguien de su familia, lo que podría estar relacionado con la oxitocina, señala un estudio que se publicó en Current Biology.

Takefumi Kilkusi de la Universidad de Azabu (Japón) y su equipo, inició un estudio al descubrir el comportamiento de uno de sus lomitos al amamantar a su camada, cuando los ojos se llenaban de lágrimas, aunque no le caían por la cara como pasa con las personas.

“Descubrimos que los perros derraman lágrimas asociadas a emociones positivas y que la oxitocina, conocida como la hormona materna o del amor, es el posible mecanismo subyacente”, indicó el investigador.

Cuando interactuamos con nuestros peluditos liberamos oxitocina, el equipo de investigadores comprobó que la reunión del humano con el lomito lo haría llorar.

Para comenzar, usaron una prueba estándar para medir el volumen de lágrimas de los perros antes y después de reunirse con su familia y vieron que aumentaba tras el encuentro con su familia, pero no con una persona desconocida.

Cuando añadieron oxitocina a los ojos de los animales, su volumen de lágrimas también aumentó, lo que apoya la idea de que la liberación de esta hormona desempeña un papel en la producción de lágrimas cuando los firulais y su familia vuelven a estar juntos.

Además, pidieron a voluntarios que calificaran las fotos de las caras de los perros, con y sin lágrimas artificiales, y resultó que las personas daban respuestas más positivas cuando veían perros con ojos llorosos.

Estos resultados sugieren, según el estudio, que “la producción de lágrimas de los perros ayuda a forjar conexiones más fuertes entre nosotros y ellos”.

Se han convertido en compañeros de nosotros, y podemos formar vínculos, en este proceso, “es posible que los peluditos que muestran ojos llorosos durante la interacción con nosotros reciban más cuidados”, estimó el investigador.

Kikusui explicó que parece que los lomitos producen lágrimas en situaciones que consideramos “felices”, aunque aún no han comprobado si también lo hacen en respuesta a emociones negativas.

Yo sí creo que los lomitos que se reencuentran con sus seres queridos si lloran, al final no hay nada mejor que la familia en donde uno se encuentra seguro y con amor, y donde sabemos que pase lo que pase siempre estaremos cuidados.

Espero que nunca ni ustedes ni mi familia tengamos que experimentar el momento de “lágrimas de alegría” de nuestros peluditos, porque eso sería que nos hemos separado y no creo que a nadie los agrade esto.

En fin, los voy a tener que dejar porque la casa está en total silencio, y eso indica que están dormidos, claro después de un arduo día de trabajo, o que Sr. Miau está haciendo algo que no debe y las otras pillas solo lo están observando.

 “No importa lo malo que haya sido tu día. Si tienes un perro, siempre te recibirá una cara feliz al llegar a casa”. – Anónimo.

Como siempre te deseo muchas huellitas 🐾🐾🐾 de amor en casa. PdC.

Escrito por La Loca del Gato 🐈 y Otras…

Foto de Jaris Remigio.

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