Ayer 25 de noviembre fue el Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer, y el activismo para poner fin a la violencia contra las mujeres y las niñas no terminó ayer, continúa durante 15 días más, hasta el 10 de diciembre como lo marca la ONUMujeres.
Pero qué importa la fecha o los días, cada mujer en casa debe marcar un nunca más una acto de sumisión, ni de humillación ni de violencia. El activismo para poner fin a la violencia contra las mujeres y las niñas es, debe ser todos los días en todo momento.
Que éste no se acabe hasta que ya no haya una mujer maltratada; hasta que la ONUMujeres nos deje de dar cifras como que una de cada tres mujeres se ve afectada por algún tipo de violencia de género.
Hasta que nos dejen de decir que cada 11 minutos una mujer o niña muere asesinada por un familiar y por si fuera poco, no piden ayuda o no pueden hacerlo, porque solo menos del 40 por ciento de quienes sufren violencia buscan algún tipo de auxilio.
Este año, como lo menciona ONUMujeres, la violencia contra la población femenina ha presentado un incremento como consecuencia de la pandemia de COVID-19, a lo que se suman otros factores como el cambio climático, el conflicto mundial y la inestabilidad económica.
Por ello, con el lema ¡ÚNETE! Activismo para poner fin a la violencia contra las mujeres y las niñas, la Organización de las Naciones Unidas hace un llamado a la sociedad a sumarse a 16 días de activismo (del 25 al 10 de diciembre) con una sola voz: poner fin a la violencia de género.
Al sumarnos a un activismo de 16 días, de todos los días, nos solidarizamos con quienes han perdido a una mujer a manos de la violencia.
Pero también hacemos más sonoras y fuertes las voces de las sobrevivientes y activistas del mundo que luchan por reducir y prevenir la violencia contra las mujeres y las niñas, y proteger sus derechos.
Un activismo que podemos iniciar desde casa; que cada madre que tenga una hija o un hijo lo eduque sin distinción de género; que desde casa, con educación se rompa todo acto de violencia, inculcando que antes de ser hija o hijo o hije somos seres humanos, somos individuos, somos personas y que como tal tenemos derecho a una vida sin violencia ni sumisión ni humillación. PdC.
