En algunas partes del mundo ya es 2023, en nuestro país nos faltan unas horas. Muchas personas ya hacen un recuento de lo logrado y lo no cumplido; otras comienzan a preparar la lista de los “buenos propósitos”.
Si eres de los que cada que inicia un año enlista una serie de compromisos a “cumplir”, antes que otra cosa, recuerda que lo mejor será mantener una actitud positiva durante los 365 días, eso te dará la fuerza para continuar aun cuando las cosas no salen como lo planeaste.
Para que no te sientas frustrado al final del año por no haber cumplido todo lo que te trazaste, en cualquier momento debes tener claras tus metas, incluso poder replantearlas, señala la académica de la Facultad de Psicología (FP) de la UNAM, Guadalupe Medina Hernández.
Si ya estás por escribir las metas del año, recuerda lo que dice la experta: el único requisito para establecer propósitos es que siempre estén fincados sobre la realidad, porque construir “castillos en el aire”, es decir, crearse ilusiones, puede causar daño; las caídas son “duras y depresivas”.
Como propósitos de salud mental para el año que está por iniciar, puntualiza Guadalupe Medina, podemos proponernos cambio de actitud porque “si bien es cierto que las cosas no siempre salen como uno quisiera y no podemos cambiar el mundo, sí podemos reaccionar de manera diferente, con una actitud positiva”.
Es decir: ¿queremos ver siempre lo que nos falta? O por qué no mejor cultivar una mirada positiva y de satisfacción, que nos permita valorar lo que sí tenemos.
Somos lo que pensamos y no hay que perderlo de vista, sobre todo cuando andamos por la vida con pensamientos negativos. Hay que quitar de nuestro vocabulario las palabras negativas, y en vez de decir “no puedo”, decir “me está costando trabajo, pero voy a resolverlo”.
Hay que concentrarnos en lo que sí queremos: paz, respeto, comprensión, señala la psicóloga. PdC.
Foto de Tirachard Kumtanom.