Guadalajara es una hermosa ciudad donde puedes pasar hermosos momentos, como visitar el Centro Histórico y Tlaquepaque o recorrer las pirámides de Guachimontones, o el Lago de Chapala o conocer la Ruta del Tequila y además de todo esto disfrutar de su rica gastronomía.
Y ya que menciono gastronomía, les platico que me acabo de enterar que hay un nuevo restaurante que te hará sumergirte en los encantadores rincones de Italia sin salir de Guadalajara.
Así que si vives en esa ciudad, acércate a Donatella, un hermoso restaurante diseñado por MM Estudio Interior.
Más que ser un lugar para comer, es una experiencia que despierta los sentidos y transporta a sus comensales a la tradición Italo-mediterránea en todo su esplendor.
Con la visión innovadora del experto en diseño de restaurantes, el arquitecto Marco Martín, Donatella nace para convertirse en el nuevo espacio donde la comida trasciende para convertirse en una experiencia de inmersión cultural.
Este hermoso lugar se integra armoniosamente a la historia de Barbarella, evocando la visión de una de las hijas del fundador, quien vivió en Italia y anhelaba plasmar su legado culinario familiar en un lugar único.
Para el ambiente del lugar, Marco ha logrado fusionar el encanto italiano con la calidez mexicana, creando una atmósfera acogedora que celebra lo mejor de ambas culturas despertando emociones y dejando huella en quienes lo visitan.
Desde los tapices hasta la vajilla, cada detalle en este restaurante ha sido cuidadosamente seleccionado para transportar a sus invitados a las encantadoras calles de Sicilia, los callejones de Roma y las terrazas soleadas de la Toscana.
El restaurante, ubicado en la calle más icónica de la ciudad, dentro del Parque Juan Diego, ofrece un jardín exterior exuberante de más de 4,000 m2, donde la naturaleza se convierte en cómplice de la experiencia gastronómica.
Su propósito es que cada segundo en el restaurante se convierta en una experiencia memorable, desde el baño de mujeres con su espejo tornasol que genera reflejos infinitos, hasta un teléfono que permite escuchar conversaciones de Donatella con sus amigos, o la imponente escultura de sirena que se ha convertido en el ícono del lugar, cada rincón de este lugar está diseñado para cautivar y sorprender.
El objetivo de Marco Martín es ir más allá de lo ordinario, despertar la imaginación y explorar nuevos horizontes.
Con Donatella y Barbarella, no sólo ha diseñado un restaurante, ha creado un sueño compartido que invita a cada comensal a un viaje inolvidable a través de la belleza, la gastronomía y la cultura italiana.
Después de saber esto no tengo duda que en mi próximo viaje a Guadalajara me daré un espacio para poder ver este hermoso restaurante, para darle gusto al ojo, pero también al paladar porque no dudo que será una grata experiencia culinaria el visitarlo. CM/PdC.
