*Paco Salgado
Hay un bello lugar que deseamos recomendar a las personas mayores, principalmente, pero también a las personas de todas las edades, aquéllas que disfrutan de la naturaleza, de los lugares cálidos, del clima y de su gente, con buena comida, buenas bebidas (café y cerveza) pero, además, de buena música, alegre y bullanguera.
Ese lugar existe, en el corazón de Veracruz, una región que se alza con imponente belleza y un potencial inigualable: las Altas Montañas. Esta zona, que abarca 51 municipios, es un crisol de riqueza natural, cultural, económica y turística, donde la majestuosidad del Pico de Orizaba se fusiona con el dinamismo de ciudades como Orizaba, Córdoba, Fortín, Río Blanco, Nogales y Ciudad Mendoza, en el centro del estado.
Un gigante dormido que despierta el interés, es el imponente Citlaltépetl, también conocido como el Pico de Orizaba, el volcán más alto de México, se erige como el guardián silencioso de esta región.
Su cumbre nevada no solo ofrece paisajes espectaculares, sino que también es la fuente de agua fresca y cristalina que alimenta lagunas como la del Rincón de las Doncellas, en Mendoza y la de Ojo de Agua, en Orizaba, sin olvidar la de Nogales.
Estas lagunas, verdaderos oasis de serenidad, invitan al esparcimiento y la conexión con la naturaleza, ofreciendo la oportunidad de disfrutar de balnearios naturales y actividades al aire libre.
Un polo de desarrollo con visión de futuro es lo que representa la zona de las Altas Montañas de Veracruz, pues no son solo un destino turístico; son además un promisorio polo de desarrollo económico e industrial. La ubicación estratégica de la región, sus recursos naturales y la infraestructura existente han propiciado un ambiente fértil para la inversión y el crecimiento.
Ciudades como Orizaba, la “Ciudad de las Aguas Alegres”, con su rica historia y arquitectura cuenta con teleférico que lleva a los visitantes hasta la cumbre del Cerro del Borrego, y con un Tobogán de la Montaña, que permite admirar desde las alturas gran parte de la ciudad. Y qué decir del gran Parque Jurásico, que hace maravillar a niños y adultos, entre otras diversiones.
Córdoba, la Ciudad de los 30 Caballeros, conocida por su gran acopio de la producción cafetalera, y Fortín, con su vibrante actividad comercial, son ejemplos del dinamismo que impulsa esta zona.
La diversidad de sus municipios permite el desarrollo de diversos sectores en esta vasta región que se ubica en la zona centro del Estado de Veracruz.
* Turismo: Más allá del Pico de Orizaba y las lagunas, la región ofrece una variada gama de atractivos. Desde pueblos mágicos hasta rutas de café, senderismo y ecoturismo, las Altas Montañas tienen el potencial de consolidarse como un destino de primer nivel.
* Industria: La presencia de parques industriales, de cervecerías que aprovechan el agua del volcán, y la disponibilidad de mano de obra calificada fomentan la inversión en manufactura, logística y otros sectores clave.
* Agricultura: La riqueza de sus suelos permite la producción de café de altura, caña de azúcar, frutas y una diversidad de productos agrícolas que abastecen tanto el mercado local como el nacional.
Ciudades Emblemáticas, Corazones Vibrantes
Las ciudades que conforman esta región son vitales para su desarrollo.
Orizaba, con su encanto colonial, su teleférico y su renovado centro histórico, se ha posicionado como un referente turístico.
Córdoba, promotora del café regional del café y con una activa vida cultural, es un punto neurálgico para el comercio y la producción.
Fortín de las Flores, con su crecimiento urbano y comercial, es un eje de comunicación y servicios.
Río Blanco y Ciudad Mendoza, con su legado industrial y su empuje social, complementan el panorama de una región en constante evolución.
Las Altas Montañas de Veracruz, con su inmensa belleza natural, su creciente infraestructura y el espíritu emprendedor de su gente, se perfilan como una de las regiones más prometedoras del estado. Su capacidad para conjugar el desarrollo económico y turístico con la preservación de sus recursos naturales la convierte en un modelo a seguir. PdC.
Foto de David Martínez Camarillo.
