CDMX, Diciembre.- Pablo Labra Vázquez, egresado del Posgrado en Ciencias Químicas de la UNAM, desarrolla terapias contra el cáncer basadas en moléculas que se activan con luz infrarroja.
Investigadores como Pablo continúan trabajando en encontrar tratamientos para combatir el cáncer que en el mundo ha causado aproximadamente 10 millones de muertes en 2020.
Con estos tratamientos, altamente selectivos y que actúan a nivel molecular, en su primer etapa se centró en mejorar la quimioterapia fotoactivada en la que se usan fármacos cuya toxicidad se activa aplicando luz sobre la zona que abarca el tumor.
Como el daño celular se restringe al área iluminada, la quimioterapia fotoactivada produce menos efectos adversos que la quimioterapia convencional.
La segunda parte de la tesis aborda otro tratamiento moderno llamado terapia por captura neutrónica en boro (BNCT, por sus siglas en inglés).
Este enfoque terapéutico se sitúa entre la quimioterapia y la radioterapia: se administra al paciente un fármaco rico en boro que se concentra lentamente en el tumor.
Luego, cuando la concentración es máxima, éste es irradiado con neutrones de baja energía produciendo la fisión de los átomos de boro y liberándose energía ionizante que destruye a las células,
Puesto que sólo se irradia la zona que abarca el tumor, la BNCT también representa una terapia más selectiva contra el cáncer, minimizando el daño a tejidos saludables.
Una de las dificultades actuales, sin embargo, es la determinación precisa y en tiempo real de la concentración del fármaco en el tumor antes de comenzar la irradiación”, reconoce Pablo Labra.
Déjenme les comento que con estos tratamientos, Pablo Labra Vázquez, obtuvo el Premio Weizmann 2021 a la Mejor Tesis de Doctorado en Ciencias Exactas, que otorgan la Asociación Mexicana de Amigos del Instituto Weizmann de Ciencias y la Academia Mexicana de Ciencias (AMC).
Él se graduó como Químico Farmacéutico Biólogo en la Facultad de Química (FQ) de la UNAM y cursó maestría y doctorado en Ciencias Químicas en esta casa de estudios, bajo la tutoría de José Norberto Farfán García, profesor de esa entidad académica; y con la cotutela de la tesis doctoral de Pascual Lacroix, del Laboratorio de Química de Coordinación (LCC) del Centro Nacional de la Investigación Científica (CNRS) de Francia.
En 2020 se convirtió en el primer estudiante graduado del programa de cotutela entre el Posgrado en Ciencias Químicas de la Universidad Nacional y la de Toulouse III Paul Sabatier de Francia, obteniendo así el grado de doctor en Ciencias Químicas (con mención honorífica) por ambas universidades.
Es coautor de 13 artículos científicos y actualmente se encuentra en Toulouse, donde trabaja como investigador posdoctoral.
Vean de que calidad son los investigadores y científicos mexicanos, y lo mejor, preocupados siempre por encontrar terapias para acabar con enfermedades que provocan miles de muertes, en este caso el cáncer. PdC.