Cuando la tecnología es usada de manera exagerada puede traer riesgos en diversos aspectos de la vida, y la salud es un ejemplo de ello. Antes, el estrabismo o pérdida de la alineación de los ojos, se tenía entendido que sus causas eran congénitas o por traumas craneoencefálicos o patologías crónicas.
Sin embargo, aquí es donde entra el uso excesivo, ahora se observa que la prolongada exposición a dispositivos electrónicos como tabletas y celulares puede ser causante de visión doble en infantes.
Pongamos atención a la profesora de la Facultad de Medicina de la UNAM, Jessica Vargas, porque dice que últimamente se registran casos de niños y jóvenes con estrabismo adquirido, asociado al uso desmedido de dispositivos electrónicos.
Los afectados empiezan con una endotropía y tienen doble visión por usar celulares y pantallas cerca (a 15 o 20 centímetros de distancia o menos).
Y es que, observar una imagen tan cerca hace que los ejes visuales converjan en ella. Aunque esto es normal, si se mantienen así durante mucho tiempo, pueden propiciar que los ojos se empiecen a desviar verdaderamente.
Veamos que recomienda la experta para prevenir este trastorno:
*Disminuir las horas de uso del dispositivo.
*Utilizarlo de acuerdo con la edad.
*Se recomienda, por ejemplo, que las tabletas no se empleen antes de los seis años. Sin embargo, frecuentemente los pequeños las usan, incluso celulares para entretenerse.
*Prohibir el uso desmesurado porque puede predisponer a presentar desviaciones de los ojos.
*Lo recomendable es que cada 20 minutos de uso de una tableta, celular o computadora se haga una pausa y se descansen 20 segundos viendo a lo lejos (20 pies o seis metros), antes de volver a mirar la pantalla.
La especialista universitaria comenta que en algunos pacientes, la disminución de su uso puede hacer que desaparezca el estrabismo. De acuerdo con el grado de la desviación y en que situaciones se acompaña la patología, es posible tratarlo con toxina botulínica o con cirugía.
Antes hay que descartar un error refractivo; si lo hay, corregirlo, y ver cómo se comporta la desviación.
Pero lo importante, subraya, es la prevención y la educación para la salud. Hay pacientes que llegan tarde a consulta, por eso la recomendación es que si se sospecha que se tiene el ojo desviado, ya sea del hijo, familiar, amigo o propio, es preferible asistir al oftalmólogo. PdC.
