Miscelánea

Adicción y enfermedades en cada trago de refresco

¡Qué pena!, pero por las venas de los mexicanos más que sangre corre un torrente de miel, pues según un estudio de la Universidad de Yale, nuestro país es el primer consumidor de refrescos en el mundo, lo que significa que en promedio un mexicano se bebe 163 litros al año.

Pero la situación no queda ahí si tomamos en cuenta que el azúcar genera adición, por eso no podemos dejar de consumirlos, lo que nos convierte en una población adicta al refresco.

En el infográfico de la Facultad de Medicina de la UNAM, Dulce adicción ¿por qué no paramos de tomar refresco?, explica que al ingerir tales cantidades de azúcar, una lata contiene 10 cucharadas más o menos, se dispara nuestros niveles de dopamina y activa el núcleo accumbens.

Se estarán preguntando qué cosa es eso del núcleo accumbens; es una región del cerebro vinculada con el placer y la recompensa, lo que lleva a que cada que bebemos un refresco del sabor o de la marca que sea, nos hace sentir bien.

Pero, hay un pero, sus efectos duran poco, por ello cada vez debemos tomar más si queremos alcanzar la misma satisfacción.

De esa forma se crea un círculo vicioso, pues al querer sentirnos bien, bebemos más refresco y así hasta crearse una adición a la bebida azucarada que al mismo tiempo provocará un torrente de enfermedades.

Florence L. Théodore, del Instituto Nacional de Salud Pública refiere que ingerir refrescos o bebidas endulzadas en exceso, se asocia con padecimientos como obesidad, diabetes tipo 2, derrames cerebrales, gota, asma, cáncer, artritis reumatoide, enfermedades arteriales coronarias y óseas, problemas dentales y de conducta, trastornos psicológicos, envejecimiento prematuro y adicción.

Luego de investigaciones, los expertos consideraron los peligros que trae el consumo diario de refrescos; evaluaron su aporte calórico como factor de riesgo para desarrollar obesidad y síndrome metabólico, pues una cuarta parte de la ingesta calórica de los mexicanos proviene de las bebidas azucaradas. PdC.

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