¿Conoces al vencejo? quizá no porque es un ave originaria de Eurasia y África, o quizá sí, ya que es un pájaro que suele pasar hasta 10 meses seguidos surcando el cielo sin parar, pero lo que queremos platicarte es que se ha reducido su población drásticamente en los últimos años.
Aunque su tamaño es pequeño, es muy fuerte pues tiene la capacidad de pasar toda su vida en vuelo, no paran ni para comer, ni para descansar, es más duermen en vuelo, pero eso sí, solo se detienen para reproducirse.
Como ven es un ave fascinante, y como tal hoy 7 de junio se celebra el Día Mundial del Vencejo, una iniciativa de la organización Vencejos Sin Fronteras que trata de sensibilizar sobre la importancia de estas magníficas aves que suelen vivir en las ciudades.
Recorren miles de kilómetros buscando mejor clima en África donde pasan todo el invierno hasta que regresan a Europa en primavera y verano; se establecen en las ciudades para reproducirse y sacar adelante a sus crías.
Son catalogados como insecticidas naturales pues su alimentación es totalmente a base de insectos; un solo vencejo puede comerse hasta 800 al día, y una sola familia de estos pajaritos hasta cuatro kilos al año; por eso son valiosos pues mantienen a los insectos en niveles adecuados en las ciudades.
Los vencejos son fieles a sus lugares de cría y reproducción, pero al hacerlo en las ciudades, al volver del invierno, muchas veces se encuentran con dificultades que no esperaban, como destrucción de sus lugares de cría por reformas en los edificios, la contaminación en las ciudades o el uso de pesticidas.
Esto ha causado que su población se vea reducida drásticamente; por eso la Sociedad Española de Ornitología/Birdelife llama a la población de las ciudades a donde llegan los vencejos, evitar reformas en el exterior de los edificios durante la temporada de cría o planear huecos o lugares donde puedan nidificar.
Y esto, teniendo en cuenta que estas aves son un indicador de salud de los ecosistemas urbanos y que realizan una simbiosis con el ser humano, es importante que se tengan en cuenta en la planificación de las ciudades.
Si tienes la suerte de que en tu ciudad haya vencejos, observa a estas extraordinarias aves en sus acrobáticos vuelos y ver como poco a poco al atardecer, van ascendiendo cada vez más para prepararse para dormir en pleno vuelo, a unos dos mil metros de altitud. PdC.