Tomando en cuenta que yo nunca en la vida había tenido un gato y mis hijos menos, cuando recién llegó Sr. Miau a casa, no contábamos con mucha información de cómo tratar a un minino. Así que una noche “el Panzón” entra a la recámara de mi hijo y se acerca a él, mi hijo sale corriendo de su recámara espantado gritando: “mamá el gato se descompuso está haciendo rrrrrrr”; después de parar de reír como buena familia, le dije que no se había descompuesto, que el ruido que hacía no era otra cosa que un ronroneo y que si se le había acercado era porque quería que lo acariciara y le hiciera mimos.
Ya calmados todos, nos preguntamos por qué hacia ese sonido y qué significaba, y claro, dada nuestra falta de conocimiento en el mundo gatuno y como quería ser una buena “Karen”, investigamos sobre la “descompostura” del peludo.
Leyendo en mi master Google encontramos naturesvariety.com en donde explican sobre el maravilloso ronroneo de estos increíbles mininos.
En el portal mencionan que el ronroneo es una de las vocalizaciones más características y más apreciadas de los peludos, pero guarda secretos sobre su sentido exacto.
Se desconocía el mecanismo gracias al cual los peludos pueden producir este sonido, ahora se sabe que los gatos ronronean por la contracción y relajación rítmica de los músculos de la laringe. Con su vibración, la laringe regula el paso del aire hacia las cuerdas vocales y el resultado es un sonido bajo y continuo que puede producir con la boca cerrada en el que sólo se aprecia una pequeña pausa entre una fase y la otra de la respiración.
Ellos empiezan a ronronear desde muy pequeños, con dos días de vida ya se puede escuchar a los gatitos ronronear mientras maman. Se cree que esa acción puede tener el mismo sentido que la sonrisa de un bebé, que se siente bien y está a gusto.
Con el tiempo el ronroneo se multiplica; sucede durante una interacción amistosa con otro peludo; lo hacen las madres al amamantar a los gatitos o durante el cortejo o una sesión de acicalamiento recíproco.
También producen este sonido cuando se relacionan de forma amistosa con las personas. Se puede escuchar mientras los acariciamos o cuando quieren atención o comida. Un estudio reciente sugiere que el ronroneo dirigido hacia las personas varía según el contexto.
Las Karen y Karencios saben diferenciar cuando el minino ronronea para pedir comida o mientras lo acaricia; el ronroneo para indicar que tienen hambre es más agudo dentro del típico sonido bajo, llegando incluso a alcanzar en algunos momentos una frecuencia similar a la del llanto de un bebé.
Los peludos pueden ronronear también cuando están solos. A menudo lo hacen cuando se están relajando encima de una manta a la vez que la amasan con las patas o cuando se están restregando contra algún objeto.
Durante mucho tiempo se pensó que el ronroneo expresaba un estado de satisfacción y bienestar, debido a muchas de las señales corporales que acompañan el ronroneo: ojos semicerrados, parpadeos lentos, músculos relajados.
Ronronean también en situaciones nada placenteras, por ejemplo, cuando están asustados, están enfermos o tienen dolor. Según un estudio reciente, casi el 20 por ciento de los gatos ronronea durante una revisión veterinaria llegando incluso a dificultar la auscultación de pulmones y corazón.
También expresa una emoción intensa, que puede o no ser agradable, podría indicar que el minino no supone una amenaza y podría servir para estimular la atención y el contacto con otro individuo.
¿El ronroneo tiene poder curativo?
Hay quien ha establecido una relación entre ronroneo y liberación de sustancias que reducen la percepción del dolor (endorfinas) y también se ha sugerido que tenga un poder curativo para el peludo. Cuando lo hacen produce vibraciones con frecuencias entre 25 y 150 Hz, similares a las que se utilizan para favorecer la reparación de fracturas, tratar problemas musculares y articulares o aliviar el dolor.
Hay muchas teorías sobre el ronroneo, sin embargo, la función exacta de este peculiar sonido todavía no se ha establecido tendremos que esperar más investigaciones para saber más.
En fin, ya sabemos un poco más de la descompostura del Sr. Miau y de que no tenemos que hacer cosas extraordinarias al respecto solo mimarlo, amarlo y cuidarlos… y obvio darle todo lo que el príncipe pida. Y al respecto los dejo porque su majestad ya está haciendo el ronroneo de “esclava a qué hora se sirve la comida en esta casa”.
“Si hubiera que elegir un sonido universal para la paz, votaría por el ronroneo”. – B.L. Diamond
Como siempre te deseo muchas huellitas 🐾🐾🐾 de amor en casa. PdC.
Escrito por La Loca del Gato 🐈 y Otras…