Cuando sonó el timbre recordé que era el día en el que el señor de la basura pasa por ella. Con los días anteriores agitados lo había olvidado. Entre despierta y dormida salí a abrirle la puerta cuando lo sorprendí muy entretenido mirando al cielo. La curiosidad me ganó y le pregunté “¿qué ve?
De inmediato me señaló y yo sin pensarlo con un tono entre pregunta y respuesta le dije: “¿es un ovni?”; no creo, respondió. “Seguramente es un dron, no ve que ahora gogle los usa para hacer el gogle maps; ¿por qué si sabe que también los usan para estudiar las zonas de cultivo, verdad? y vigilar a la ciudad.
Si claro, le respondí. Luego de llevarse la basura debidamente separada y despedirlo con un “buenos días, cuídese mucho”, directo fui a preparar una jarra de café. Mientras daba el primer sorbo escucho en la televisión que una mujer murió a manos de miembros de su familia; me pregunto cómo puede ser posible tanta violencia cuando justo la familia y el hogar es el refugio donde debiéramos sentirnos más seguros que en la calle.
Y no es que uno justifique los actos violentos que algunos grupos de mujeres cometen cuando salen a manifestarse, pero es la furia y la frustración de no ser escuchadas…en días recientes uno tras otro se han registrado (de lo que se conoce) hechos en donde la violencia contra las mujeres traspasa el horror…
Una llamada por el celular interrumpe mi atención; al otro lado una amiga me habla para contarme que en su casa todos tienen COVID y de inmediato recuerdo haber leído que siguen en aumento los contagios por el descuido, por bajar la guardia en las medidas de prevención. Y sí, solo hay que asomarse un poco a la calle y muchos ya no llevan cubrebocas.
Ya entrados en esto de los virus me entero que ayer frente a la Secretaría de Salud, colectivos de la sociedad civil le piden a las autoridades más vacunas contra la viruela del mono y menos estigmas. Y es que resulta que a raíz de que el sábado el director de la Organización Mundial de la Salud, Tedros Adhanom Ghebreyesus declarara emergencia internacional por esta enfermedad, en su informe dice que aun cuando es una emergencia de salud pública de importancia internacional, de momento se trata de un brote concentrado entre los hombres que tienen relaciones sexuales con hombres…por ello es que salen de inmediato grupos de la sociedad civil a pedir que no sean estigmatizados como sucedió cuando apareció el VIH…
Y es que si no es un virus es otro, pero nos traen asolados; ya hasta miedo da respirar, con tanto que le hemos hecho daño al planeta, “el destino ya nos alcanzó”, y no es que uno sea pesimista o nos guste el drama, pero de cada cosa que uno se entera que si está de hacer un alto para redireccionar.
Porque la viruela del mono no es la única enfermedad que transmiten los animales a los seres humanos, por ejemplo ahí está también la gripe aviar… la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) lo confirma con un dato: el 70 por ciento de las enfermedades infecciosas humanas tienen un origen animal…
Con razón en el Senado (@senadomexicano) hicieron un foro sobre “Sanidad animal y prevención de epidemias. Cuidando la salud de las y los mexicanos”, para tratar la sanidad, inocuidad, zoonosis y la salud general como temas de seguridad nacional.
Para quienes no tenemos registrado el dato, zoonosis es cualquier enfermedad de los animales que incidentalmente puede transmitirse a las personas…
Y es que nomás lean lo que dice Verónica Gutiérrez Cedillo, del Centro Nacional de Programas Preventivos y Control de Enfermedades, en cuanto a la importancia de la zoonosis en la salud pública por la frecuencia y severidad con que impactan la salud humana: se estima que de cada 10 enfermedades infecciosas, seis son transmitidas por animales.
Y que la vigilancia epidemiológica ha captado 147 enfermedades de reporte obligatorio, de las cuales 14 son enfermedades zoonóticas como, rabia, brucelosis, teniasis, cisticercosis, entre otras…
Apenas me relajaba del día cuando me entero que en el norte de la isla de Luzón en Filipinas se registró ayer martes un terremoto de magnitud 7.1… no pues ya hasta se me quitó el sueño, yo que pensaba dormirme temprano…PdC.
Escrito por MM.
Foto de Brett Sayles.