Llega el otoño y con él la temporada en donde más se produce el betabel, también conocido como remolacha. Esta hortaliza es la protagonista de la ensalada de Navidad, sin ella no tendría color.
Esta rica verdura aporta a nuestro cuerpo mucho más de lo que creemos, ya que tanto las hojas como la raíz contienen una gran cantidad de nutrientes, proteínas y vitaminas.
Entre ellos: fósforo, zinc, fibra, antioxidantes, vitamina C, vitamina B6, vitamina K, magnesio, potasio, cobre y manganeso, lo que deriva en el mejoramiento de la salud de quien lo come.
Su consumo es uno de los más rendidores pues se puede aprovechar desde sus hojas para hacer infusiones que ayudan a desinflamar y calmar algunos dolores, hasta la raíz que se puede consumir cruda, cocida, encurtida o enlatada.
También, se utiliza en la industria alimentaria como colorante, y es materia prima en la producción de azúcar conocida como “azúcar de remolacha”.
En esta temporada de frío en nuestro país, el campo nos regala la posibilidad de cuidar nuestro sistema inmunológico a través de nuestra alimentación, el betabel es una de las muchas verduras que nos ayuda a mantenernos sanos.
El betabel es un tubérculo, ayuda a tener un estilo de vida saludable, u hortaliza de raíz gruesa, pertenece a la familia de las amarantáceas, es de color púrpura intenso debido a la betacianina y tiene forma de bulbo.
Aunque su origen es del Mediterráneo, en nuestro país el betabel se desarrolla en climas fríos, y se produce todo el año, pero tiene una mayor cosecha en otoño.
En 2021, se produjeron más de 22 mil toneladas de betabel en el país, siendo Puebla el productor líder. PdC.
Foto de Eva Bronzini.