Miscelánea

Flexibilidad y agilidad demanda la nueva forma de trabajo

Luego del temblor del 19 de septiembre de 2017, por los daños que sufrieron muchos edificios públicos y privados, algunas empresas mudaron el trabajo a casa, dando así el primer paso para el “home office”; dos años después viene la pandemia de COVID y se catapulta esta nueva forma de laborar en el hogar.

Es por ello que ahora las empresas a nivel global viven grandes desafíos por la transformación en la manera de trabajar que potenció la circunstancia sanitaria.

Por ejemplo, ya es común la coexistencia de colaboradores en formatos remotos, híbridos o presenciales y al mismo tiempo, bajo diferentes formas de vinculación contractual y residiendo en distintos lugares del mundo.

De hecho, según Manpower, el 33 por ciento de las empresas mexicanas estarán conformadas por empleados remotos a finales de este año.

Estos ajustes en los modelos laborales implican también concebir nuevos paradigmas en cuanto a la gestión del talento, porque los procesos tradicionales requieren ser más ágiles, explica Ximena Paul, CEO de Nala.

Nala, una empresa nacida en América Latina pero con alcance global, ha desarrollado una plataforma para gestionar el talento que está cambiando la forma en que los líderes miden la productividad y maximizan la contribución de los colaboradores en entornos laborales con ritmos cambiantes y vertiginosos.

Es la primera plataforma que tiene la capacidad de identificar y fidelizar el talento con un mantra basado en la agilidad; eso significa medir rápido y sin fricción; después, analizar y entregar datos accionables, y por último, recomendar o saber qué hacer con esos datos.

Lo anterior ofrece la posibilidad de trascender el caos de la burocratización de los procesos tradicionales de evaluación en empresas y que chocan con los nuevos modelos de trabajo, explica Ximena Paul.

En estas nuevas formas de laborar, la flexibilidad permite ofrecer un abanico de posibilidades para los colaboradores, donde está implícito no solo su desarrollo profesional sino otras áreas de su vida.

La fundadora de Nala, María Fernanda del Castillo considera que ciertos cargos nunca volverán al trabajo 100 por ciento presencial, y en todos los niveles esperan flexibilidad que si las empresas no responden a esta demanda, los colaboradores terminarán por renunciar.

Porque dice del Castillo que no tendrán problema en buscar nuevas oportunidades en un mercado laboral globalizado. Por ello, la prioridad es fidelizar y maximizar el talento. PdC.

Foto de Peter Olexa.

Deja un comentario

Your email address will not be published.

Te puede gustar