Mucho se ha dicho, pero casi siempre se nos olvida que no es el juguete de moda ni el juego de video o el smartphone más novedoso que los niños quieren para ser felices. No, los pequeños necesitan estar con sus padres y rodeados de las personas que los aman.
Ellos quieren convivir y aprender con ellos. Es mejor una visita a un parque público para jugar con los columpios con mamá y papá que el mejor de los juguetes, comenta Susana Salazar Gómora, especialista en psicología infantil del Centro de Especialización de Estudios de la Infancia (CEEPI).
En ocasión del Día del Niño y la Niña que se celebra el próximo 30 de abril, las especialistas: maestra Claudia Sotelo Arias, directora del centro y Susana Salazar comparten algunas consideraciones sobre cómo afrontar algunos problemas y sus posibles soluciones.
*Si un niño acude a una escuela privada y sus padres entran en una crisis económica (o pérdida del empleo). “Si se tuvo dinero y ahora no, lo que debe hacerse es platicar con los hijos para hacerles ver que no tiene nada que ver con el amor y el afecto.
Hay que poner en juego la creatividad y poner énfasis en la edificación de las habilidades afectivas de los hijos. Si se tiene niños reflexivos y conscientes de la realidad de sus padres no habrá problema y ni frustración”, considera Sotelo Arias.
*Se vive al día y los padres buscan el lado negativo de la vida. “Aquí es más complicado porque se entiende que existe un problema de frustración crónica y los hijos absorben esta dinámica.
Es el principio de la envidia, del rencor y de muchos más problemas emocionales a futuro. La creatividad es esencial, los juegos entre padres e hijos son la solución”, refiere Salazar Gómora.
*Ante todo lo que es preponderante es que los niños tengan una sana niñez. “Se puede predecir cómo será una sociedad en el futuro de acuerdo a la infancia que tengan sus niños: niños que no tienen infancia, serán adultos vengativos y resentidos.
Sociedad con niños felices, producirán una sociedad productiva y basada en solidaridad y el afecto”, sostuvo Sotelo Arias.
*Nada como el juego y los cuentos infantiles. El juego entre padres e hijos integra. Jugar es conocer, además de ser lo más divertido, es totalmente gratis. Asimismo, los padres de familia deben retomar la parte de las lecturas de cuentos infantiles porque fomenta, además del hábito de la lectura desde la niñez, la imaginación de los niños.
Lo importante es crear una atmósfera familiar positiva, no obstante las adversidades de la vida. “El problema no son las cosas materiales ni el Día del Niño que es una fecha hermosa, el conflicto recae en los padres de familia que basan su felicidad en la cuestión material y no en los afectos.
Hay que recordar que existen familias que tienen todo lo económico, pero nada los une en lo afectivo y viven tan infelices como los que no tienen los medios económicos suficientes. Ser padre es dar, y se debe dar tiempo, amor y experiencia”, señala Sotelo Arias. PdC.
Foto de Ketut Subiyanto.