Nos estamos asando. Nos estamos congelando. Antes donde hacía frío ahora hace calor, en donde hacía calor hoy hace frío. Los niveles de los océanos y mares suben cada vez más por acción del deshielo de los glaciares. Por un lado sequías, por el otro, lluvias atípicas arrasan con localidades. Todo esto por el cambio climático.
El cambio climático se intensifica en el planeta; todas las regiones se enfrentan a cambios crecientes. Los eventos extremos se presentan de manera vertiginosa y más amplia que en décadas pasadas.
Los impactos afectan la seguridad de los ecosistemas, la biodiversidad y las sociedades en el planeta; los riesgos se incrementan en el corto, mediano y largo plazos con cada elevación de la temperatura del planeta.
Y solo existe una pequeña ventana de oportunidad de ejercer acciones para contener los retos del cambio climático en niveles seguros, alerta el Sexto Reporte del Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático (IPCC, por sus siglas en inglés).
El destino no está lejos para nuestro país, ya está aquí.
La tendencia indica un aumento de la temperatura por encima del 1.0 global, que está en algunas regiones en 1.3 grados Celsius, señala Cecilia Conde Álvarez, investigadora del Instituto de Ciencias de la Atmósfera y Cambio Climático (ICAyCC) y una de las autoras mexicanas del estudio internacional.
Para México se proyectan incrementos en la temperatura de más de 1.5 grados antes de 2030; más sequías e incendios forestales; precipitaciones extremas e inundaciones.
Y no solo en territorio nacional, también se prevén sequías generalizadas en la región de América Latina y el Caribe.
Durante la conferencia de prensa a distancia “La urgencia de actuar ante la crisis climática, visión de autores mexicanos del Sexto Reporte del IPCC”, Cecilia Conde alertó sobre las crecientes ondas de calor y la intensidad de precipitaciones severas.
Ante esto, el futuro no es nada prometedor, por el contrario, la experta comenta que se reduce la disponibilidad de agua, perdemos los arrecifes coralinos y los manglares, así como cambios negativos en los rendimientos de los cultivos. PdC.
