Partículas minúsculas de hierro, estaño, níquel y cromo, entre otras sustancias tóxicas más, es lo que contienen los cigarros electrónicos. Por ello hace unos días se emitió un alerta máxima por lo peligroso que resulta el uso de estos productos. Y es que, lo que inició como una solución para dejar de fumar tabaco se convirtió en un gran riesgo para la salud.
Ya desde el 2019, la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris), alertó sobre los daños que provoca en los jóvenes, quienes son los que más los utilizan como una opción supuestamente inocua.
Investigando nos encontramos que estos cigarros electrónicos o también conocidos como vapeadores, en el proceso de calentamiento del líquido, se emite vapor que contienen la sustancias ya mencionadas, además de materiales corrosivos como cerámica, plástico, caucho, fibras de filamento y espuma.
En aquel entonces, la coordinadora del Programa de Investigación y Prevención del Tabaquismo de la Facultad de Medicina (FM) de la UNAM, Guadalupe Ponciano señaló que es solo un mito eso de que no afectan la salud los sistemas electrónicos de administración de nicotina (SEAN, mejor conocidos como cigarros electrónicos).
A decir de la especialista, estos dispositivos resultan atractivos para los jóvenes por su diseño y por la variedad de sabores artificiales: chocolate, caramelo o goma de mascar, entre otros.
Aun cuando los jóvenes comentan que los usan para dejar de fumar, por salud, por menor costo respecto al del cigarro de tabaco, poder usarlos en sitios prohibidos para fumar y para no incomodar a los no fumadores, la experta considera que causan severos daños.
Generan crisis cardiovasculares que podrían ser mortales, pues la nicotina causa infartos al miocardio, además los pulmones se afectan ante el consumo reiterado, ya que dependiendo la marca el porcentaje de nicotina es elevado.
Explica que al no ser de agua el vapor que emiten, contamina el aire; además, contiene pequeñas partículas que se acumulan progresivamente en el aparato respiratorio que lo dañan y por consecuencia perjudica la salud de quien lo consume. PdC.