Los hechos ocurridos el pasado 19 de septiembre de este año, han sido solo coincidencias, las exhalaciones del Popocatépetl de ese día y el temblor no tienen ninguna relación. Y es que ese día todo sucedió: lluvia, temblores y por si fuera poco el volcán lanzó cenizas.
Ante dichos eventos, los expertos Sergio Raúl Rodríguez Elizarrarás, del Instituto de Geología, y el vulcanólogo Robin André Campion, del Instituto de Geofísica (IGEF), destacan dichas emisiones de ceniza son habituales.
No obstante refieren que desde hace tiempo Servando de la Cruz Reyna, investigador del IGEF, sugirió la existencia de una relación entre sismos de gran magnitud con el comportamiento del volcán Popocatépetl.
Por lo que Robin Campion colaboró con Thomas Boulesteix en esta teoría y propusieron un índice que revisa factores como la distancia, el tamaño de la falla, las emisiones de gases y la producción de ceniza, el cual fue publicado en agosto pasado en el Bulletin of Volcanology.
En el caso del movimiento telúrico originado en Michoacán, que se generó a más de 700 kilómetros del Popocatépetl y tuvo una magnitud de 7.7, no es muy probable que haya influido en la actividad, explicó el experto del IGEF.
Esto podría observarse en las próximas semanas, debido a que la correlación entre el sismo y la actividad del Popocatépetl no es inmediata, aclaró el investigador.
“El valor del parámetro que hemos propuesto para ver si un sismo puede o no influenciar la actividad del volcán es marginalmente favorable para que este sismo (19/09/2022) pueda aumentar la actividad del volcán; habría sido más categórico si el sismo hubiera sido mayor o más cercano”, explicó Campion.
La actividad del Popocatépetl está más determinada por su estado magmático, es decir, si tiene magma recién inyectado (pues lo hace mucho más activo con emisiones constantes de lava y ceniza).
Pero en la actualidad todos los monitoreos realizados indican que la alimentación magmática de Don Goyo es baja y esto reduce aún más la posibilidad de que el último gran sismo tenga alguna influencia en su actividad, apuntó.
No es posible predecir con exactitud cuándo se reactive, produce ceniza desde hace 27 años y seguirá haciéndolo, por lo que la población debe mantenerse atenta a las recomendaciones del CENAPRED y de las autoridades correspondientes. PdC.