Contrario a lo que se pudiera pensar por los tiempos actuales y agitados que vivimos, que las parejas jóvenes y modernas lo que menos quieren es tener hijos, aunque parezca increíble, no es así.
El deseo de tener un bebé es un anhelo que muchas personas en edad reproductiva buscan cumplir; sin embargo, este objetivo puede verse limitado al experimentar problemas en la salud reproductiva.
En México una de cada seis parejas que busca lograr un embarazo tiene problemas para lograrlo; de acuerdo con estadísticas del INEGI, por lo menos 1.5 millones de parejas sufren infertilidad.
Y cada año se diagnostican más de dos mil nuevos casos de infertilidad, la que cada día tiene mayor incidencia en parejas jóvenes pero que, gracias a nuevas tecnologías y avances científicos en reproducción asistida como el Term Stim TM, hoy tiene solución.
Actualmente, la mayoría de los casos de infertilidad pueden resolverse, ya sea mediante procesos de baja complejidad como el coito programado, capacitación de semen o inseminación artificial, entre otras.
A su vez, existen técnicas de alta complejidad, entre las que destaca la fecundación in vitro. No obstante, incluso los tratamientos de reproducción asistida pueden fallar debido a la mala calidad de los óvulos.
Hasta ahora no existen pruebas exactas para saber si la calidad del óvulo será la adecuada para poder realizar un tratamiento de Fertilización In Vitro (FIV).
Esta condición puede ocasionar que el procedimiento falle y, por ello, sea recomendable buscar la opción de la donación de óvulos, una decisión que corresponde tomar al paciente.
“Aunque la mayoría de las pacientes que realizan un procedimiento de reproducción asistida logran embarazarse en un primer intento, existen quienes requieren someterse al procedimiento de Fecundación In Vitro en más ocasiones, debido a que la calidad de los óvulos no permite el desarrollo del embrión”, explica Israel Maldonado Rosas, biólogo de la Reproducción Humana, especialista en embriología reproductiva y fundador de la clínica de fertilidad CITMER.
De acuerdo con el especialista, CITMER tiene como objetivo ofrecer una solución a las personas que cuentan con una condición que impide el desarrollo embrionario a pesar de los tratamientos de Fecundación In Vitro.
“La opción que dimos en un inicio fue la donación de óvulos, método que se utiliza como última elección cuando los óvulos de la futura mamá no nos permiten continuar con el proceso adecuado, pero ni ella ni su esposo estaban abiertos a esta alternativa”, comentó el Dr. Maldonado.
Tras el rechazo de su paciente por utilizar los óvulos de una donante, la Dra. Lina Gabriela Villar Muñoz, especialista en Biología de la Reproducción Humana, Cofundadora y Directora Médica de las clínicas CITMER en México, detectó un artículo científico en Estados Unidos, el cual describe un nuevo enfoque para mejorar la calidad del óvulo y brindar una oportunidad a quienes buscan conseguir este objetivo: estimulación a término o Term Stim TM.
La especialista contactó al autor del artículo, el Dr. Dmitri Dozortsev, experto en fertilidad traslacional de Houston, Texas, y descubrió que esta innovadora tecnología pendiente de patente se podía licenciar, por lo que, a través de CITMER Medicina Reproductiva llevó a cabo una colaboración tecnológica con Repronova, empresa con sede en Texas, logrando que Regina, la paciente que estaba a punto de dejar su sueño de convertirse en madre atrás, fuera la primera mujer en México en experimentar la innovación de Term Stim TM.
“Lo que normalmente sucede durante la estimulación ovárica convencional para la realización del procedimiento de Fecundación In Vitro, es que el médico administra medicamentos hasta que el folículo más grande de la paciente alcanza el tamaño adecuado, lo que sirve como punto de referencia para recolectar óvulos, pero con Term Stim TM es muy diferente”, explicó la Dra. Villar.
Destacó que de acuerdo con Term Stim TM, así como el tamaño del vientre de la mujer embarazada no predice la madurez del feto, el tamaño del folículo tampoco puede predecir la madurez del interior del óvulo. Por lo tanto, en lugar del tamaño, Term Stim TM se enfoca en el tiempo, asegurando que al igual que en el embarazo a término, existe un término para la maduración del óvulo.
De esta manera, el enfoque de Term Stim TM extiende el tiempo de crecimiento de un folículo, permitiendo que un óvulo dentro del folículo alcance la madurez a término, acumulando más fuerza antes de ser fertilizado y logrando así que el médico use los mismos medicamentos que en la FIV convencional, pero ajustando su cantidad cuidadosamente para ralentizar el crecimiento del folículo a un ritmo más natural.
Después de utilizar Term Stim TM, Regina tuvo por primera vez embriones en desarrollo normal y quedó embarazada de sus propios óvulos. Desde entonces, en CITMER se ha dado solución a diversos casos con pobre calidad en los óvulos utilizando esta nueva tecnología.
“Es un placer poder ofrecer a mis pacientes, particularmente a las que rebasan la edad biológica óptima para ser madres, que va de los 25 a los 35 años, esta nueva opción antes de hablar de óvulos de donante”, dice la Dra. Lina Villar.
Finalmente, los especialistas aseguraron que Term Stim TM es una de varias tecnologías pendientes de patente que ofrecen significativas soluciones a quienes buscan formar una familia sin lograrlo. PdC.
Foto de Nataliya Vaitkevich.