Para empezar la semana de manera relajada, olvidando un poco que hoy iniciamos nuestras actividades, les queremos compartir una efeméride muy curiosa que nos encontramos, se trata del Día Mundial de los Calcetines Perdidos.
Se sabe que hoy 9 de mayo se celebra, pero se desconoce cómo surgió o quién la inventó o quién tuvo la ingeniosa idea de darle un día a esta prenda, por lo pronto resulta que los calcetines perdidos también tienen su (cinco minutos de fama) fecha, ¿cómo ven?
Y es que, sean blancos, negros, grises o de colores, con rayas, con puntos, formales o con figuras divertidas, los calcetines siempre se pierden, a veces uno no se explica cómo sucede, pero de qué pasa, pasa…
¿Cuántos calcetines has perdido y no han aparecido jamás?
La palabra calcetín proviene del latín calcea y a su vez de la palabra calceus (zapato). Se estima que los primeros calcetines surgieron en el año 256 en Egipto. Era un trozo de lana que se utilizaba para proteger los pies. Como prueba de ello, dicen que puedes verlos en exhibición, en el museo municipal de Leicester (Inglaterra).
Pero bueno, por si no lo sabías resulta que perdemos aproximadamente 1.200 calcetines a lo largo de nuestra vida. Podemos extraviar nuestro par de calcetines favoritos por circunstancias misteriosas y sin explicación alguna. Pues la lavadora no es la única culpable, ya que pudiste olvidarlo al dormir alguna vez fuera de casa o simplemente no eres muy organizado con tus cosas ¿Te ha ocurrido?
Es momento entonces de tomar acciones para que no ocurra una tragedia tan grande como esta. Anuda cada par de calcetines o mete un calcetín dentro de otro antes de lavarlos.
Mientras los echamos a la lavadora, investigamos un poco más sobre los calcetines perdidos, y nos encontramos que una encuesta realizada por Samsung dio como resultado que nada más y nada menos, cada año desaparecen 84 millones de calcetines sólo en Reino Unido; imagínense en todo el mundo, sería un mundo de calcetines.
Y según otro estudio, hay cuatro factores principales por los que se pierden los calcetines en la lavadora: la ilusión óptica que tienen, nuestro desinterés por buscarlos más allá de la lavadora, no prestamos atención a lo que hacemos y, si vivimos con más personas, tendemos a confundir los calcetines a la hora de hacer los pares.
Y bueno, esperemos que ya no se nos pierdan los calcetines o que la sugerencia de meter el calcetín dentro del otro antes de lavarlos resulte y no se te vuelva a perder un calcetín para que no quede incompleto tu par de calcetines favoritos. PdC.
Foto de Susanne Jutzeler en Pexels
