La hija de Quino, la niña de seis años, preguntona, curiosa, punzante y sensible a la realidad; sí, ella, Mafalda, llega para solidarizarse con todos aquellos que no les gusta la sopa y con los que crecieron buscando una forma para parar al mundo porque se querían bajar.
A partir de hoy y hasta el 18 de diciembre, de miércoles a domingo de las 10 de la mañana a las 5 de la tarde, podrán visitar de manera gratuita a Mafalda en el Museo de las Constituciones, está en la calle del Carmen 31, esquina San Ildefonso, en el Centro Histórico de la Ciudad de México.
Mafalda está aquí, en cada chica que se indigna, en cada madre que busca a sus hijas desaparecidas, en cada joven que desafía los modelos impuestos, en cada abrazo sororo, en cada acorde de la canción Sin miedo, en cada defensora del territorio.
Dice la coordinadora para la Igualdad de Género, Tamara Martínez Ruíz, de la UNAM durante la inauguración de la muestra Miradas a lo “femenino”, basada en las tiras de Quino sobre género y derechos.
Traer a Mafalda al Museo de las Constituciones (MuCo) de la Dirección General de Divulgación de las Humanidades de la UNAM, es una ráfaga de viento fresco lleno de humor profundamente humano.
Al usar la vida cotidiana de un grupo de niños y sus familias como el universo donde se aprende el bien y el mal, a ser solidarios y de donde todos obtenemos nuestra idea de comunidad y de justicia, comenta en su mensaje la coordinadora de Humanidades de la Universidad Nacional, Guadalupe Valencia García.
La muestra nos acerca de nueva cuenta a cuestionamientos que la pequeña, de la mano de Quino, se hacía desde hace más de cinco décadas y siguen vigentes, dice la curadora de la exposición, Mireya del Pino Pacheco, y directora de Estudios y Políticas Públicas del Consejo Nacional para Prevenir la Discriminación.
El objetivo es que sea un espacio lúdico y de reflexión sobre la necesidad de cuestionar y desbaratar los roles impuestos por estos estereotipos, que no hacen otra cosa que limitar las libertades y el ejercicio de derechos humanos con una desventaja desproporcionada para mujeres y niñas.
Si bien Quino no realizó su obra pensando en una perspectiva de género, su espíritu siempre estuvo al lado de los derechos de los más débiles: de los niños y de las mujeres, y de evidenciar las desigualdades, comentó Julieta Colombo Marrón, en representación de Sucesores de Joaquín Salvador Lavado Tejón (Quino).
“Él entendía que el movimiento feminista tenía su razón de ser y siempre apoyó las manifestaciones de las mujeres y sus reivindicaciones desde su lugar de humanista gráfico”.
La muestra temporal está centrada en las temáticas sobre género y derechos que el humorista gráfico e historietista argentino, nacionalizado español, plasmó en las tiras de Mafalda a partir de 1964. PdC.