* Día Mundial de los Delfines en Cautiverio
Acabar de una vez por todas con la retención de los delfines que se encuentran en cautiverio, así como con el cierre de los delfinarios que actualmente existen en distintos países de todo el mundo, es el objetivo principal del Día Mundial de los Delfines en Cautiverio que se conmemora este 4 de julio.
Los delfines, animales acuáticos que gozan de una gran inteligencia y belleza, al estar en cautiverio, este afecta de forma significativa su desarrollo como su comportamiento.
De acuerdo a investigaciones llevadas a cabo por importantes científicos y estudiosos de la materia, se pudo conocer que al estar en cautiverio, los delfines pueden sufrir de altos niveles de estrés, además de afectar sus funciones fisiológicas como el apareamiento e inclusive puede ser una de las causas para que esta especie desaparezca.
El sólo hecho de permanecer gran parte de su vida habitando dentro de los tanques con espacios sumamente reducidos comparados con su hábitat natural, puede causarles daños irreversibles.
Los delfines son animales con unas características físicas muy particulares y especiales, que no se adaptan al cautiverio, sino que, por el contrario, son especies marinas que necesitan del vasto universo marino para reproducirse y vivir de forma natural.
Esto es una pregunta que debería plantearse toda la humanidad, ya que, de continuar con el uso de estos animales para el entretenimiento y el comercio, lo más probable es que termine desapareciendo de los océanos de todo el mundo.
Podemos ver con preocupación cómo cada vez más, los delfines que se encuentran en cautiverio, terminan muriendo por distintas causas, pero la principal es estar fuera de su hábitat, así como no gozar total libertad.
En muchos países, sobre todo de Europa, ha decidido prohibir los delfinarios para acabar de una vez por todas con esta tragedia. Esto ha sido posible gracias al clamor de miles de personas que ven esta práctica como un hecho abominable contra una especie marina, capaz de mostrar emociones y de entablar algún tipo de comunicación con los seres humanos, que lo hacen más especiales.
Cuando los delfines están en su propio hábitat, son capaces de realizar verdaderas proezas marinas. Son criaturas que presentan un comportamiento casi humano, mostrando sentimientos y actitudes que todavía el hombre no ha podido descifrar.
Son animales súper veloces que pueden recorrer grandes distancias. Se calcula que en un día pueden nadar hasta 100 kilómetros, por lo cual se caracterizan por ser una especie que disfruta de la libertad que le proporciona la vida acuática.
Esto no es posible cuando son sacados del mar y depositados en piscinas de espacios realmente reducidos, que no le permiten orientarse de forma correcta, tampoco nadar como es su verdadera naturaleza.
Además, existen otros factores, que terminan matando esta bella especie como son los productos químicos que se utilizan para dar mantenimiento a estas cárceles acuáticas.
Algunos países ya han reconocido a los delfines como especies de un valor extraordinario para la humanidad. Por ejemplo, en la India son vistos como seres no humanos que no pueden ser usados para la explotación y donde ya se han declarado algunos derechos especiales para su protección.
En Ucrania, se han prohibido los delfinarios y también se ha creado un centro de rehabilitación para todos los delfines que estaban en cautiverio y han logrado su libertad y de esta manera garantizarle su supervivencia, ya que, de permanecer solos en el mar, difícilmente logren sobrevivir.
El primer país que tomó la firme decisión de prohibir los delfinarios fue Costa Rica. A él se unieron Brasil, los Estados Unidos, Israel, Inglaterra, entre otros. Con esta sabia decisión se busca dignificar y salvar la vida de una especie única, que ha mostrado claros indicios de poseer una inteligencia sobrenatural. PdC.
Foto de Arpan Bhatia.