Cuando una mujer en los tres primeros meses de gestación se ha expuesto a sustancias tóxicas, a un agente infeccioso, o consume alcohol, fuma o tiene deficiencia vitamínica (falta de ácido fólico), es posible que al nacer su hijo tenga “labio leporino”.
El labio y paladar hendido, patología congénita comúnmente conocida como “labio leporino”, es multifactorial y va desde la deficiencia vitamínica hasta los antecedentes genéticos. Pero además es una malformación de gran impacto para los padres y para el niño durante su crecimiento. Además de resultar costo y largo su tratamiento.
El doctor Fernando Soriano Padilla, miembro del Consejo Mexicano de Cirugía Oral y Maxilofacial, explica que la etapa crítica del embarazo es durante el primer trimestre, tiempo en el que se conforma el organismo, mientras que el resto de los meses es de maduración de todos los sistemas.
Son cinco etapas para que se forme la cara. El labio y el paladar se desarrollan entre la cuarta y la semana 12 de gestación. Si la madre en este periodo se expone a algún proceso infeccioso o agente químico o bien a una radiación, la conformación se detiene y se ocasiona la hendidura, ya sea en el labio o en paladar o en ambos.
La mujer embarazada debe cuidarse durante toda la gestación, no obstante, en ese lapso de tiempo debe extremar precauciones, pues el producto es más vulnerable a cualquier factor.
No se sabe en qué proporción fumar o beber durante el proceso de gestación, ocasione la posibilidad de tener un hijo con dicha patología, pero si es muy alta la probabilidad que padezca ésta u otro síndrome que conlleva a tener otras deformidades congénitas.
Es importante que durante el embarazo la mujer deje de fumar y beber, además de someterse a estudios para llevar una buena evolución del embarazo.
Cuando el bebé nace con esa patología, generalmente los padres se culpan, pensando que arrastran alguna causa hereditaria, lo cierto es que como dice el doctor Soriano Padilla, puede o no haber casos anteriores en la familia y existir la probabilidad de tener un hijo con malformación.
Cuando hay un caso de labio y/o paladar hendido en la familia, existe mayor probabilidad que el niño nazca con ese defecto congénito.
Sin embargo, puede suceder que cuando en una pareja no existe ningún antecedente y tienen un niño con esta malformación, para el segundo se tiene la posibilidad en cuatro por ciento de padecerla, y para un tercero, nueve por ciento de que la padezca.
La fisura o labio palatino, como médicamente se le nombra, puede presentarse aislada o en ambas, ya sea en labio y paladar o solo labio hendido o paladar hendido.
Como la pobreza es uno de los factores, en el interior del país se presenta con mayor frecuencia esa patología, ya que entre su población la alimentación no es buena, hay un mal manejo del embarazo por falta de atención médica y porque generalmente las mujeres registran deficiencia de ácido fólico.
No hay una causa específica
Aunque dice el especialista que esta malformación también se puede presentar en bebés de mujeres con mejores recursos económicos, pues durante su embarazo, en los primeros tres meses, quizá pudieron haber estado expuestas a una de las causas mencionadas.
El labio y paladar hendido es más común en hombres, mientras que el paladar sólo en mujeres. No hay una causa específica del por qué es más común cierta patología en un género que en el otro.
Pero ésta se puede presentar de manera unilateral o bilateral, es decir en los dos lados de la nariz, y el problema no sólo altera la porción del labio, sino hasta el piso de la nariz.
De cada 10 pacientes con labio y paladar hendido, seis son del lado izquierdo, tres del derecho y uno presenta en ambos lados, es decir, bilateral, malformación más compleja en su recuperación.
Por todo lo que implica tener un hijo con labio y paladar hendido, no solo para los padres, sino también para el pequeño cuando crece, es importante que la mujer en proceso de gestación extreme precauciones en los tres primeros meses.
Sobre todo, menciona el doctor Fernando Soriano Padilla, las mujeres deben consumir ácido fólico desde temprana edad y no exponerse a factores que pongan en riesgo el desarrollo del bebé. Continuará mañana. PdC.
Primera de dos partes.
Segunda entrega: Labio leporino causa de bullying